El municipio de Campana comenzó este mes a cobrar la tasa vial sobre la venta de combustibles y reavivó una vieja polémica en el sector. El intendente Sebastián Abella, de Cambiemos, dispuso un gravamen extra para el consumidor de hasta $ 0,40 por litro. Es la décimo sexta localidad bonaerense en cobrarlo.
La aplicación de la tasa vial va en contra de los objetivos del Gobierno, dado que implica un costo adicional para el consumidor en un contexto en que una de las prioridades de la Casa Rosada es contener la inflación. Además, se trata de una medida errónea según lo entienden los funcionarios del Ministerio de Energía.
La tasa vial de Campana implica un cobro en la venta de los combustibles de 0,30 pesos por litro de nafta súper, 0,40 para las premium, 0,20 para el gasoil grado 2 y 0,40 para el gasoil grado 3. En este caso, Campana no cobrará la tasa vial municipal al GNC (Gas Natural Comprimido), aunque si se lo hacen en otras localidades bonaerenses cercanas como San Miguel o Tigre.
El intendente Abella (PRO) definió en febrero comenzar a cobrar la tasa para favorecer la situación fiscal del Municipio. Se diferenció así de su par de Pilar, Nicolas Ducoté, el partido vecino, que la dejó de cobrar este año. Esto significa que en pocos kilómetros de distancia de la zona norte del conurbano bonaerense los precios de los combustibles son muy distintos.
Aunque con muchos vaivenes judiciales, la tasa vial se cobra en el país desde 2012 (la primera fue la provincia de Córdoba y dejó de hacerlo en 2016) y, si bien no fue una creación de Cambiemos, la gobernadora del PRO de la Provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, mantiene en su gestión unos 16 municipios donde se cobra esta polémica tasa, dando un mensaje poco claro al sector de hidrocarburos y expendio de combustibles.
Los municipios donde aun sigue vigente la tasa vial son San Miguel, Tigre, San Fernando, Vicente López, San Isidro, Junín, Hurlingam, Escobar, San Martín, Malvinas Argentinas, Ituzaingó, José C. Paz, Merlo, General Rodríguez y Campana.