Un hogar bonaerense de ingresos altos sin subsidio que consume 25 m3 mensuales abona una factura de 9700 pesos. Esos 25 m3 equivalen a dos garrafas de 10 kilos, las cuáles cuestan 21.000 pesos en total, un 116% más, según el precio oficial, aunque muchos distribuidores cobran hasta 17.000 pesos cada garrafa, lo que amplía la brecha al 250%. Si se compara con hogares pobres subsidiados que tienen gas por red la diferencia llega al 368% y el Programa Hogar destinado a reducir esa diferencia cada vez incide menos porque los subsidios están congelados hace más de un año.