Post Energia – Wide 1

  
Europa y Estados Unidos ahora tienen otras prioridades
Con precios que hoy son un problema, el gobierno discute la Ley de Biocombustibles justo cuando pierden terreno en el mundo
Mar 6
abril 2021
06 abril 2021
Por el alza de los alimentos, el precio de los biocombustibles duplica al de las naftas y gasoil. Además, Europa le fijó un tope al consumo de biocombustibles por el riesgo ambiental indirecto que suponen al alentar la deforestación. Para los países centrales, los autos eléctricos aparecen como una prioridad frente a los motores de combustión.
Escuchar nota

Cuando se sancionó la ley 26.093 de promoción de los biocombustibles en abril de 2006, el etanol y el biodiesel eran presentados como los combustibles del futuro. Un recurso renovable capaz de reducir la contaminación, generador de empleo en el campo argentino y con un amplio potencial de crecimiento a partir del negocio exportador, ya que la demanda internacional era creciente. Además, con el barril de crudo por encima de los 70 dólares sus costos de producción eran comparables con los del petróleo y sus derivados sin necesidad de incentivos. Sin embargo, esa realidad se fue modificando a lo largo de los últimos 15 años y la discusión sobre la continuidad del régimen promocional se da un contexto diferente.

Precios

Un primer punto que hoy desincentiva el pasaje a los biocombustibles es el tema precios. Si se compara la nafta súper con el etanol y el gasoil con el biodiesel, los biocombustibles cuestan casi el doble, o en algunos productos, incluso más.

  • Una comparación del precio en el surtidor indica que la nafta súper cuesta 39.443 pesos por metro cúbico y el etanol 48.700 pesos, pero si los precios se ajustan por poder calórico el etanol trepa a 79.942 pesos, pues para producir la misma cantidad de energía se necesitán más metros cúbicos de etanol que de nafta.
  • Por su parte, en el caso del gasoil el precio por metro cúbico es de 40.123 pesos y del biodiesel 80.078 pesos, pero al ajustarlo por poder calórico el biodiesel se dispara a 94.816 pesos, según un relevamiento realizado por EconoJournal en el mercado de combustibles.

Es decir, de la foto de hoy se desprende que la decisión de prorrogar el cupo actual de biocombustibles se da de bruces con la política del gobierno de evitar grandes saltos en los precios de las naftas y gasoil en surtidor. Al contrario: al ser mucho más caros que los derivados del petróleo, los bios terminan traccionando, en este escenario, aumentos en las estaciones de servicio.

Para el gobierno es una ecuación compleja. Si priorizara la política antiinflacionaria y lo fiscal, no tiene incentivos para prorrogar el esquema actual de promoción a los biocombustibles. Más bien lo contrario.

Riesgo ambiental

A principios de este siglo, numerosos estudios indicaban que los motores que usaban biocombustibles emitían menos gases de efecto invernadero con costos de producción similares a los de los combustibles fósiles. A raíz de ello, la Unión Europea incentivó su producción a partir de 2003 y el consumo se multiplicó por diez en el Viejo Continente en apenas una década.

Sin embargo, en 2015 la Comisión Europea retrocedió sobre sus pasos y fijó un tope al consumo de biocombustibles. Una de las razones que llevaron a este cambio de política fue el impacto indirecto que estaba produciendo en el medio ambiente al alentar la deforestación para ampliar las superficies cultivables de maíz y soja. Sus críticos argumentan que los biocombustibles son incluso más dañinos que los combustibles fósiles porque no solo no reducen la acumulación de CO2 en la atmósfera sino que la incrementar de la mano de la reducción de los bosques.

La alternativa eléctrica

Los países centrales ahora apuestan por los autos eléctricos en reemplazo de los motores de combustión. Gran Bretaña anunció el año pasado que prohibirá la venta de automóviles de combustión interna a partir de 2030. Irlanda y los Países Bajos también pusieron como tope el 2030, Noruega el 2025 y Francia y España el 2040.

En Estados Unidos Biden anunció en enero que reemplazará toda la flota de vehículos del gobierno federal por autos eléctricos, “vehículos, limpios, fabricados aquí”. Además, se espera que le de impulso a la transición energética que se vio frenada durante el gobierno de Donald Trump.

A partir del análisis de estas variables, el objetivo no debería ser la promoción de los biocombustibles como se la discutió en 2006 sino pensar una transición gradual que permita ir reconvirtiendo a ese sector elevando la eficiencia y competitividad del parque instalado con producción de derivados como la glicerina en plantas de biodiesel y aprovechamientos industriales y energéticos de desechos. Está claro que no se pueden poner en riesgo los puestos de trabajo que genera el sector de un día para el otro, pero la tendencia refleja que los objetivos de los países desarrollados y eso terminará afectando irremediablemente también a la industria local.

0 comentarios

  1. Todo falso. Mientras actualmente en la Argentina la oferta de biodiesel se limita al biodiesel de primera generación (producido a partir de aceites vegetales) en EU la oferta de biodiesel se compone del biodiesel de primera generación y de un biodiesel de segunda generación (producido a partir de aceites usados, residuos industria aceitera, etc.).

    La proliferación del biodiesel de segunda generación es producto de políticas de estado que promueven su uso (ILUC Directive 2015 & RED II) . En EU el biodiesel de segunda generación o 2G (UCO+Animal Fats) incrementó su participación del 8 al 31% en los últimos 8 años, desplazando los aceites tradicionales (colza, soja y palma).

  2. Algunas simples observaciones:les recomendaría ver algunos datos. Respecto del calculo comparativo del poder calórico, no entiendo el sentido del mismo salvo que se lo busque relacionar con el costo de los no renovables vs. renovables no contaminantes, cosa que en el mundo esta fuera de discusión porque nadie duda que son dos cosas distintas. ¿Donde vieron datos que indiquen que en la UE se están consumiendo menos biocombustibles? En lo que sí estpy de acuerdo es en que se viene lo «electrico». pero la pregunta final es:¿ Cuanta energía electrica se esta produciendo con renovables? Entiendo el avance de solares y eolicos, pero que se continúa quemando carbón mineral a la bruta, es lo cierto.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

LAS MÁS LEÍDAS

1.

| 03/18/2024

CEO global de Raízen: “Cuando veo la macroeconomía argentina, creo que el gobierno está en el camino correcto»

El CEO de Raízen, uno de los tres mayores jugadores del mercado de combustibles del país, trazó un panorama sobre el rol que puede jugar la Argentina junto con Brasil en el mercado de biocombustibles. En diálogo con EconoJournal, analizó la posibilidad que existe en cuanto a la exportación y la potencialidad de los recursos. También, remarcó la necesidad de que se establezcan reglas claras que atraigan inversiones.
| 03/14/2024
En la última versión -más acotada- de la Ley Bases no figura el apartado IV de Biocombustibles. La normativa es esperada en el sector, ya que el biodiesel y el bioetanol se mezclan con el gasoil y las naftas. El gobierno esperaría el proyecto de ley que están elaborando algunas provincias productoras.
| 03/08/2024
Las provincias de Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos, Tucumán, Salta y Jujuy, productoras de biodiesel y bioetanol, están elaborando un proyecto de Ley de Biocombustibles que podrían presentar en la reunión del Pacto de Mayo. Es similar a las nueve modificaciones a la Ley 27.640 que proponía la Ley Ómnibus del gobierno de Javier Milei. Por qué Buenos Aires, San Luis y La Pampa, también productoras de bios, no acuerdan.
| 03/01/2024
La suba en los surtidores que se aplicará en las próximas horas se explica por la actualización del impuestos a los combustibles líquidos (ICL) y también por el aumento del precio regulado de los biocombustibles y el impacto de la devaluación del peso. Por eso, fuentes privadas señalan que el incremento de las naftas y gasoil partiría de un piso del 7% y podría ser mayor si las refinadoras quieren reconocerles a los productores un precio cercano al internacional, tal como se comprometió el gobierno.
WordPress Lightbox