La marca Mobil™ advirtió un aumento en la demanda de aceites lubricantes biodegradables y decidió potenciar la oferta de estos productos. El aumento de la demanda a raíz de la legislación en varias partes del mundo creó la necesidad del uso de lubricantes biodegradables de alto rendimiento en equipos como sellos, Sistemas Hidráulicos, sistemas de Engranajes y Grasas.
La premisa básica apunta a prevenir la contaminación del mar, ya que los lubricantes ambientalmente aceptables reducen el riesgo de exposición y daño al medio ambiente en relación a la tecnología convencional, siendo una alternativa menos costosa que, por ejemplo, un cambio de equipo o contaminaciones accidentales.
Si bien la demanda de aceites biodegradables está creciendo en las actividades marítimas por su efectividad, mayor productividad y beneficios ambientales, todavía hay cierto desconocimiento sobre su origen, definición, composición e, incluso, aplicación. En principio, cualquier producto es biodegradable. Sin embargo, ciertas estructuras químicas son más susceptibles a la descomposición que otras. Hablando específicamente de lubricantes, los aceites vegetales y los ésteres sintéticos se degeneran en la naturaleza mucho más rápido que los materiales a base de petróleo en las mismas condiciones.
Las certificaciones internacionales establecen que, para ser clasificados como lubricantes ambientalmente aceptables, los aceites también deben ser mínimamente tóxicos (bajos niveles de toxicidad) y no bio-acumulativo (no contiene sustancias que los organismos vivos no puedan eliminar), además de ser biodegradable, por supuesto.
Los aceites y grasas clasificados como biodegradables, por ejemplo, se descomponen en el medioambiente hasta en 28 días, siendo más seguros que los lubricantes minerales. Otro punto favorable es su desempeño, con una alta estabilidad térmica y oxidativa, las nuevas tecnologías de aceites sintéticos biodegradables también ofrecen una alta protección contra la corrosión y el desgaste, además de proporcionar una mayor vida útil de la carga de aceite.
La mayor o menor utilización de este tipo de aceite puede estar ligado a su alto costo, que es superior al mineral. Sin embargo, dada su mayor eficiencia y productividad, ligada a la reducción de la exposición al riesgo ambiental, los expertos señalan que su relación costo-beneficio es superior a los lubricantes convencionales, lo que compensa su uso.
Estos productos cumplen con los requisitos del Permiso general para embarcaciones (VGP) para lubricantes ambientalmente aceptables*.
* Los lubricantes ambientalmente aceptables se definen en el Permiso general para embarcaciones (VGP) 2013 de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) como lubricantes que son biodegradables, mínimamente tóxicos y no bio-acumulativos.