Si las tarifas permanecen congeladas se debería disponer de una partida adicional de 56.087 millones de pesos para subsidios, por encima de lo ya previsto en el presupuesto 2021. La forma de evitarlo sería ajustar un 63% el precio del gas en boca de pozo que paga el usuario, lo que derivaría en un aumento tarifario que, de acuerdo al mes, oscilaría entre 26% y 35%.