La compañía canadiense concreta la adquisición de las áreas El Tordillo, La Tapera y Puesto Quiroga, además de los activos de transporte de gas y petróleo. La operación fue motivo de una negociación con Tecpetrol como operadora y sus socias YPF y Pampa Energía, lo que refuerza el proceso de desinversión de los grandes jugadores de las áreas convencionales.