En vísperas de un nuevo aumento en los precios de los combustibles en surtidores, el ministro de Energía, Javier Iguacel, reveló que su cartera y la de Agricultura analizarán en estos días la posibilidad de incrementar la participación proporcional de los biocombustibles como componentes en las naftas y el gasoil.
En el contexto de suba de la cotización internacional del petróleo y de amesetamiento de precios de los granos, “el biodiesel y el bioetanol empiezan a ser competitivos y estamos viendo que hacer al respecto”, comentó el funcionario ayer en conferencia de prensa para anunciar la suba de tarifas eléctricas.
Iguacel refirió que mantuvo reuniones con su par de Agricultura, Luis Etchevehere, para aumentar el corte obligatorio de biocombustibles en el mercado local y ello incida “en una baja de los precios promedio” del rubro.
El funcionario ratificó la vigencia de la política de “total libertad” para que las empresas establezcan los valores de venta al consumidor, y afirmó que “tenemos los precios de los combustibles mas competitivo de la región”, aunque aclaró que ello “depende de a cuanto esté el dólar y el (petróleo) crudo” en el mercado internacional.
Tal postura data de la gestión de su antecesor, Juan José Aranguren, pero ocurrió que en los meses de desasosiego por la escalada del dólar, del crudo Brent y de la inflación, el entonces ministro convocó a las principales petroleras y activó un acuerdo para no aumentar los precios (en mayo y junio) y compensar en el segundo semestre.
El acuerdo sucumbió en el marco de la “tormenta cambiaria” que menciona el gobierno, e Iguacel ratificó ahora que “nadie va a cobrar compensación alguna”.
No obstante esta ratificación de política de precios, Iguacel afirmó que “vamos a asegurar que no haya cartelización” entre las empresas petroleras.
En la actualidad los cortes del gasoil y de las naftas con biocombustibles son en una proporción del 10 y del 12 por ciento, respectivamente y, según trascendió de fuentes del sector, se analiza aumentar dicha proporción en forma progresiva, hasta al menos el 20 por ciento a mediano plazo.
Los precios de los biocombustibles se incrementaron a principios de julio entre 7 y 13 por ciento según fueran naftas o gasoil.
La actualización de precios llevó el biocombustible para su mezcla con nafta de 18 pesos a 19,14 pesos para el litro producido en base a caña de azúcar (6,3%) y de 15,16 pesos a 15,92 pesos por litro generado en base a maíz (5%).