Andrés Cirnigliaro, quien se viene desempeñando como presidente de Servicios Públicos Sociedad del Estado, la empresa encargada de brindar agua y energía en la provincia de Santa Cruz, asumirá al frente de la estatal Integración Energética Argentina (IEASA). La designación se oficializaría el próximo jueves. Cirnigliaro fue sugerido inicialmente por la gobernadora santacruceña Alicia Kirchner y cuenta con el respaldo de Máximo Kirchner. El principal desafío que tendrá por delante este joven funcionario es revisar el contrato firmado para la construcción de las represas patagónicas, pues el consorcio que integran la china Gezhouba y Electroingeniería pidió la readecuación del mismo.

IEASA es una empresa clave dentro del sector energético ya que está a cargo de la importación de gas de Bolivia y del GNL que llega por barco a la terminal de Escobar. A su vez, es la encargada de fiscalizar la construcción de las represas de Santa Cruz.

La compañía, bautizada originalmente como Enarsa, maneja un presupuesto anual de unos 150.000 millones de pesos, pero desde diciembre permanece acéfala, pues luego del cambio de gobierno su presidenta Claudia Mundo se fue al Instituto de la Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires, y su vice, Alejandro Fontán Balestra, desembarcó en Mercado Libre. Actualmente, IEASA cuenta con dos directores heredados de la gestión anterior, Rodolfo De Luca y Mario Thiem, quienes no tienen ningún poder de decisión real y están esperando simplemente a que anuncien a sus reemplazos.

Desde que asumió Alberto Fernández se convocó varias veces a la asamblea de la compañía para designar a nuevas autoridades, pero como en el gobierno no se ponían de acuerdo la decisión se fue postergando. El lunes 17 se realizó un último intento, pero finalmente se llamó a cuarto intermedio por otros 30 días para tener tiempo de consensuar una nueva conducción.

Cirnigliaro finalmente es el elegido, un joven de 29 años vinculado a La Cámpora que asumió al frente de la santacruceña Servicios Públicos Sociedad del Estado el pasado 10 de diciembre y antes se había desempeñado como asesor del ex presidente del organismo, Lucio Tamburo.

La tarea de Cirnigliaro no será sencilla, pues el pasado 10 de febrero, la Unión Transitoria de Empresas, que tiene a su cargo la construcción de las represas de Santa Cruz, envió una carta a IEASA solicitando la readecuación del contrato.

La nota se presentó apenas unos días después de que la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, realizara una visita por las instalaciones del complejo ubicado al sur de Santa Cruz acompañada por Gerardo Ferreyra, uno de los dos titulares de Electroingeniería, que estuvo más de un año encarcelado por la causa conocida como “los cuadernos de la corrupción”.

En la misiva enviada a IEASA, el consorcio denunció que los vaivenes macroeconómicos de la Argentina y el atraso en los pagos por parte de la contratista motivaron el quiebre del contrato de construcción homologado en 2016 y pidió su revisión, pero los dos directores residuales que quedaron de la gestión de Macri les dijeron que ellos no tenían autoridad para resolver sobre ese tema y les recomendaron dirigirse a la autoridad política pertinente. Ahora que desembarque Cirnigliaro se supone que esa negociación comenzará a tomar forma.