El Gobierno nacional aumentó los biocombustibles entre un 4% y 6% a partir del primero de octubre. Estos nuevos valores podrían impactar en el precio de los combustibles en surtidores. El biodiesel para su mezcla obligatoria con el gasoil se incrementó 4%, mientras que el bioetanol a base de caña de azúcar creció 5% y el bioetanol a base de maíz sufrió un aumento de 6%.
La Secretaría de Energía, a cargo de Javier Iguacel, actualizó los precios de los biocombustibles para todo el país, productos que por la ley 26.334 y 26.093 son de mezcla obligatoria con los combustibles. Lo hizo mediante las resoluciones 21 y 22 publicadas hoy en el Boletín Oficial.
En cuanto al biodiesel, producido a base de aceite de soja, el ejecutivo elevó el precio un 4% y la tonelada pasó de $ 26.509 a $ 27.529 desde el primero de octubre. En el caso del biodiesel, la norma establece que el corte obligatorio para la mezcla con los combustibles es del 10%.
En los considerandos de la resolución, la Secretaría de Energía, que actúa como autoridad de aplicación para fijar el precio, señala “que las recientes alteraciones cambiarias, exigen la implementación de mecanismos transitorios tendientes a limitar el impacto de las modificaciones ocurridas en las variables macroeconómicas, utilizando como referencia para el cálculo del precio del biodiesel las últimas tres cotizaciones del tipo de cambio de referencia establecido en el mes de marzo”.
En cuanto al precio del bioetanol a base de azúcar, producido principalmente en los ingenios tucumanos, el litro pasó de $ 21,09 a $ 21,99 sufriendo un aumento de casi 5%. Por su parte, el bioetanol de maíz, de impacto en el agro principalmente de la provincia de Córdoba, el litro pasó de $ 17,21 a $ 18,31 desde octubre marcando una suba de 6%. Tanto para el bioetanol a base de caña de azúcar como para el de maíz, el corte obligatorio por ley con los combustibles es del 12%.
Cabe señalar que, tal como lo publicó EconoJournal, en lo que va del año el aumento de los biocombustibles supera al de las naftas. Además, el porcentaje de retenciones a las exportaciones para el biodiesel fijado por el poder ejecutivo pasó de 8% a 15% desde julio de este año.
A su vez, la intención de Energía es ampliar hasta el 20 por ciento el corte de naftas y gasoils con los bicombustibles. La novedad fue bien recibida por los productores de bioetanol y biodiesel, aunque advirtieron que su concreción requiere que dicha secretaría considere diversos factores técnicos, económicos, y hasta culturales del consumidor para la correcta adecuación del mercado al nuevo esquema.
En declaraciones a EconoJournal, el Director Ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustibles, Claudio Molina, sostuvo que “el consumidor tiene que tener muy claro qué combustible adquiere en surtidor”, “hoy hay un corte obligatorio y sabe cuándo compra un gasoil que tiene 10 por ciento de biodiesel y 12 por ciento de etanol en las naftas” (si los excediera la empresa tiene que avisar en surtidor). Al respecto agregó que “si el nuevo programa (que está elaborando Energía) habilita al expendio de combustibles con contenido de hasta 20 por ciento de corte de bicombustibles sin aviso en surtidor, se dificulta el cabal conocimiento del consumidor sobre las características del producto que adquiere”. “El problema puede agravarse toda vez que no haya una normalización de los cortes, y por lo tanto el contenido de biocombustibles por arriba de los niveles obligatorios sea muy variable”, Agregó.
Otro aspecto relevante para los productores es que Energía pretendería gravar con el impuesto a los combustibles a los cortes mayores a la proporción indicada y solo dejar desgravada la porción del impuesto que corresponde al cargo por bióxido de carbono. Molina opinó que “si hoy cuesta difundir los biocombustibles en el mercado interno, gravarlos con este impuesto afectará la demanda significativamente”.
La producción de bioetanol alcanzaría este año el récord de 1.150 millones de litros, lo que representaría un incremento de 4,1 por ciento respecto del año pasado y de 24,2 por ciento comparado con la de 2016, según estimó el Departamento Económico de la Bolsa de Comercio de Rosario.
El país cuenta con diez plantas industriales en base a azúcar localizadas en Tucumán, Salta y Jujuy y otras cinco que producen etanol en base a granos (principalmente maíz) en el centro del país.