El subsecretario de Energías Renovables, Sebastián Kind, es un firme aspirante para asumir como director general de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA, por sus siglas en inglés), que tiene su sede en Abu Dhabi. De ser electo, dejará el cargo para asumir la conducción de organismo internacional en los primeros meses de 2019, según indicaron a EconoJournal fuentes privadas y gubernamentales.
Kind fue ratificado en su actual cargo en la órbita del Ministerio de Energía de la Nación, pocos días después de la asunción de Javier Iguacel, en reemplazo de Juan José Aranguren.
En lo que lleva de gestión, Kind dió un fuerte impulso al desarrollo de proyectos de generación de energías renovables -eólica, solar fotovoltaica, biomasa, pequeñas hidráulicas- a través de varios concursos en el marco del Plan RenovAR, logrando compromisos de inversión y mejores precios por la energía a producir.
De tales iniciativas participaron empresas locales e internacionales, y varios de estos proyectos ya están en la etapa de instalación de parques en diversas regiones del país.
Kind aplicó para el concurso para asumir como director general de la IRENA, y una definición al respecto se concretará en el último tramo de este año. Mientras tanto, en Energía respaldan su continuidad en el cargo.
El funcionario es Master en Ciencias en Energías Renovables (EUREC Agency, Bruselas; Universidad de Zaragoza; UTN de Atenas) e Ingeniero Mecánico (UTN).
Hasta su designación en el actual cargo se desempeñó como Asesor del Senado de la Nación, y en particular cumplió un rol destacado en la formulación de la nueva Ley de Energías Renovables (Ley 27.191) dentro del equipo del Senador peronista por Chubut Marcelo Guinle, fallecido en 2017.
Esta ley plantea como objetivo que a diciembre de 2025 al menos 20 por ciento de la energía que se produzca en el país sea de fuente renovable.
Kind también fue evaluador de proyectos en energía eólica para el Ministerio de Energía y Minas de Uruguay, Consultor del Ministerio de Energía de Chile y del Ministerio de Bienes Nacionales y de la Agencia de Cooperación Alemana (GIZ) en las áreas de energías renovables y procesos licitatorios.
Acerca del Plan RenovAR
El Plan RenovAR fue lanzado en mayo de 2016 y lleva tres rondas de licitaciones (1, 1,5 y 2) y entre las tres suman 147 los proyectos de generación adjudicados.
Sumados, representan 4.500 megavatios de potencia a instalar, compromisos de inversión privada del orden de los 11 mil millones de dólares, y con precios de generación que oscilan entre los 57 y 42 dólares el megawat hora, según el tipo de generación.
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Negocio solamente para unos pocos empresarios, las pequeñas pymes ni siquiera acceden al crédito para afrontar compromisos. Deberían dar créditos blandos del BID para este tipo de empresas
Pese a la buena intención de los Gobiernos anterior y actual de aumentar la participación de energías renovables hasta el 20% de la matriz energética aún estamos muy lejos de poder alcanzar el objetivo deseado.
La Ley 26.190 de 2015 que estableció los primeros concursos de precios por licitación del programa GENREN (del gobierno anterior manejado por ENARSA en dos rondas) y la Ley 27.191 que reglamentó en 2016 aquella Ley estableciendo además los incentivos fiscales(devolución anticipada del IVA, amortización acelerada del Impuesto a las Ganancias, exención del impuesto a distribución de dividendos o utilidades en caso de reinversión en el país) que fue el fundamento del programa RenoVar (del actual gobierno dependiendo de la Subsecretaría de Energías Renovables ejecutado hasta ahora en 3 rondas), el criterio que se sigue en las actuales licitaciones sigue adoleciendo de una importante limitación relacionada con la capacidad máxima permitida de generación (100 MWe).
Esto si bien apunta de diversificar la oferta de proyectos permitiendo la participación de pequeños y medianos inversores, en la práctica impide el desarrollo y presentación de proyectos con suficiente economía de escala que originen menores tarifas eléctricas reales que permitan la ejecución de los proyectos por contar con una adecuada tasa de retorno que permita llevar adelante el proyecto.
Sin embargo el actual sistema limita severamente las grandes inversiones que podrían significar buenos proyectos de inversión, fuentes de trabajo y desarrollo de la tecnología que beneficiaría grandemente a nuestra industria local.
Permitir la ejecución de grandes proyectos facilitaría la llegada de grandes empresas de fabricación e instalación de equipos y plantas que capacitarían a la industria local facilitando el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas vinculadas al sector (como ocurre con la industria automotriz y la de autopartes que han crecido junto a aquélla y hoy han ampliado significativamente su mercado local y de exportación.
El caso de la energía solar es totalmente diferente pues se ha comprobado la existencia de serios problemas en proyectos a grandes escalas a nivel mundial (Solar Reserve Crescent Dunes, y NRG Ivanpah) lo que lleva a concluir que los niveles de desarrollo tecnológico (TRL) aún no están lo suficientemente probados para ir más allá de los 100 MWe de gneración solar.
Argentina es un país con inmejorables recursos eólicos que permitirían la concreción de proyectos de mayor envergadura (en este caso la tecnología de la generación de energía eólica ha avanzado y se ha desarrollado de tal manera en los últimos 20 años que está posibilitando la ejecución concreta de proyectos de generación superiores a 500 MWe, cuya economía de escala y nivel de optimización de recursos permiten obtener tarifas eléctricas más económicas y es lo que se está imponiendo aún en países que no disponen de la variedad y cantidad de recursos.
Asimismo la envergadura y la rentabilidad de los proyectos antes mencionados permite justificar en los mismos la eventual construcción de nueva líneas de transmisión de alta tensión(que es frecuentemente el cuello de botella que deben enfrentar hoy limitan los países que están creciendo activamente en generación eléctrica de fuentes y recursos renovables.
Para complementar adecuadamente la participación de pequeñas y medianas industrias en energía eólica y solar se podría ver de obtener créditos de fomentos del BID para asistir a pymes que estén dispuestas a incursionar en energías renovables.
Tal como están planteadas hoy las licitaciones de acuerdo con el criterio dela Subsecretaría de Energías Renovables (liderada por el Ing. Kind) que no permite la presentación de proyectos superiores a 100 MWe) no permite la presentación de proyectos de mayor envergadura con adecuadas economías de escala que reflejen menores tarifas que deba pagar CAMMESA (Compañia Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico):
Con el criterio actual, el sistema de generación de energías renovables se ha convertido en un esquema de adjudicaciones que finalmente se revenden al mejor postor ante la imposibilidad de llevar los proyectos a cabo por falta de rentabilidad.
Fíjense, por ejemplo que grado de ejecución concreta de proyectos adjudicados en las 5 rondas de licitaciones.
Lamentablemente el mercado se ha convertido en los últimos años en un mercado secundario para pequeños y medianos inversores que deben acudir a unas pocas empresas consultoras tipo Aires Renewables que era propiedad de la familia Kind, o desarrolladores de proyectos eólicos que tienen acceso a la información de funcionarios de Gobierno que simplemente terminan presentando a las partes en una compra- venta de proyectos a especuladores que sólo esperan a revender los contratos o recién ejecutarlos cuando la situación mejore.
Normalmente los desarrolladores de proyectos buscan vender el proyecto, si es finalmente adjudicado a un valor entre 80.000 y 100.000 U$S por MWe y para ello buscan tarifas eléctricas que permitan el repago del proyecto mediante ardides como un teórico factor de carga muchas veces no correctamente verificado, y hacen que los proyectos no se lleguen a concretar.
Pero ésto no conduce a la ejecución concreta de proyectos que tanto necesitamos si queremos crecer, disminuyendo la dependencia de los combustibles fósiles, aumentando la llegada de inversiones genuinas al país al par que crean fuentes de trabajo, sino más bien a la existencia de un mercado paralelo que beneficia a algunos pocos vinculados con el sistema.
Una consulta más bien técnica, Rodolfo: si tenés un parque eólico de 500 MWe y se cae la generación por falta de viento en un momento crítico, como podría ser en un día de demanda eléctrica récord, ¿no corrés el riesgo de generar un problema por falta de oferta? ¿O igual tendrías capacidad para cubrir ese bache? Lo pregunto porque, si tenés 5 parques eólicos de 100 MWe, es más difícil que se te caigan los cinco, salvo que todos estén en el mismo lugar. Todo lo demás que comentás es bastante claro. Cordiales saludos.
Un soberbio y una gestión totalmente mentirosa, no hay chance que se llegue a instalar la potencia de renovable adjudicada.