La transición de la industria petrolera local en función de la decisión del Gobierno de alinear los precios internos del crudo con la cotización internacional queda de manifiesto en los indicadores que miden el nivel de actividad en el sector. Según esos datos, la actividad hidrocarburífera se ubica en los niveles más bajos desde la reestatización de YPF, el mayor jugador del mercado, en mayo de 2012.
En la actualidad, están activos 67 equipos de perforación en todo el país, según datos de diciembre. Son 13 menos que en noviembre y 24 menos que en diciembre de 2015 (91).
Por su peso específico en la industria, dado que es la compañía con más producción de hidrocarburos (cerca del 40% del total) y la que más invierte (casi un 50% de las inversiones en el upstream), la fuerte baja obedece, en gran medida, a la performance de YPF, que hoy posee 35 unidades de drilling en operación. Son 30 menos que los 65 que tenía en actividad en diciembre de 2015. Y menos de la mitad de los más de 80 equipos que empleaba a fines de 2014, todavía sin el impacto del derrumbe del precio internacional del barril.
Equipos activos de perforación
La región más golpeada es la del Golfo San Jorge, en especial en los yacimientos del norte de Santa Cruz, cuyo lifting cost es más alto que en otras cuencas productivas. En total, en diciembre estaban activos 24 equipos de perforación, siete menos que en octubre. La comparativa con diciembre de 2015 no arroja demasiadas diferencias. Ese mes estaban activas 26 unidades de drilling, apenas dos más que en la actualidad.
Hubo una compensación porque a fines de 2015, Pan American Energy (PAE) había levantado la mayoría de sus trépanos de activos y sólo contaba con un equipo activo. Hoy, en cambio, está perforando con 13 equipos. Por el contrario, YPF que en diciembre de 2015 tenía 20 equipos en operación, hoy sólo mantiene 8 en actividad.