COMODORO RIVADAVIA (enviada especial)-. Este viernes se llevó a cabo en esta ciudad el Foro Transición Energética e Hidrógeno Verde organizado por el gobierno de Chubut y la PlataformaH2 Argentina. En el encuentro, referentes de empresas dedicadas a las energías renovables, funcionarios, representantes de cámaras empresariales y de la Unión Europea analizaron cuál es el potencial que posee la Argentina para producir y exportar hidrógeno, industrializar sus recursos y cumplir con los compromisos internacionales a fin de lograr una reducción de las emisiones.
La apertura del evento estuvo a cargo del gobernador patagónico Ignacio Torres que aseguró que la agenda de transición es transversal y que su provincia tiene mucho para dar. “La Argentina necesita divisas y el mundo transición. Podemos converger en una agenda en común. Tenemos que poner esta agenda como prioridad. Los pueblos que no se sientan a pensar una agenda a mediano y largo plazo son descartables”.
Asimismo, el gobernador sostuvo: “Con el petróleo fuimos el motor energético del país. Ahora estamos en un momento en donde la empresa de bandera se replantea las inversiones y nosotros tenemos que pensar qué oportunidades se nos presentan para el largo y mediano plazo”.
Torres consideró que es necesario que exista un marco normativo que le de sustento al hidrógeno verde, que se apruebe el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) -propuesto en la Ley Bases-, ir hacia la calidad institucional y ser competitivos.
Cooperación internacional para impulsar el desarrollo
El segundo bloque del encuentro estuvo dedicado a la cooperación internacional. Allí, Pablo Iglesias Rumbo, agregado de cooperación, de la Delegación de la Unión Europea en la República Argentina; Juan Manuel Albisetti, asesor comercial de la Embajada de Países Bajos; Raimundo Ruiz Von Dessauer, oficial del Departamento Político de la Embajada de Alemania en Argentina; y Sebastián Murúa, de la Agencia de Cooperación Alemana; adelantaron que se está trabajando en la formulación de un proyecto de cooperación con la Argentina vinculado al compromiso de atraer inversiones europeas al país.
En ese sentido, remarcaron que será clave la cooperación internacional para cumplir con las metas de descarbonización de los países industrializados de la UE, y que la Argentina se presenta como un socio estratégico por su eficiencia en cuanto a la generación de energía renovable.
También, destacaron que es fundamental que se den este tipo de sinergias para potenciar el desarrollo de la tecnología, compartir conocimientos y lograr así la competitividad. No obstante, advirtieron que es necesario que haya un marco regulatorio y reglas de juego claras que atraigan y fomenten las inversiones.
Cuellos de botella
En el segundo bloque, también se abordó la cuestión del marco regulatorio para impulsar el desarrollo del sector y aprovechar todo su potencial. Juan José Rivera, secretario de Ambiente de la Provincia de Chubut, advirtió la necesidad de contar con la participación de todos los actores involucrados a la hora de tomar decisiones vinculadas a la transición -gobierno nacional, provincial, empresas, comunidad.
Por su parte, Raúl Bertero, presidente del Centro de Estudios de la Actividad Regulatoria Energética de la Universidad de Buenos Aires (CEARE), se refirió a las ventanas de oportunidad que se le abren al país con el desarrollo del hidrógeno y explicó que se van a exportar los productos que derivan de él. A su vez, que esto va a permitir la creación de polos industriales, que van a existir hidroquímicas, con fábricas de fertilizantes y cemento. Y también, que va a ser posible producir amoníaco.
RIGI y marco regulatorio
En cuanto al Régimen, Juan Manuel Alfonsín, presidente Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER), planteó que el RIGI posee muchas ventajas, pero también aspectos a corregir. Puesto que argumentó que el plazo de ingreso que establece es de dos años y que un proyecto de hidrógeno verde requiere entre 12 y 15 años. También, que fija un tope de 900 millones de dólares, cuando en el sector se encuentran analizando iniciativas que se ubican por arriba de los 20.000 millones de dólares.
De igual manera, Alfonsín y Fernando Antognazza, gerente general de la Asociación de Generadores de Energía Eléctrica de la República Argentina (AGEERA), repararon en uno de los cuellos de botella que posee el segmento que está ligado a la saturación de las líneas de alta tensión. En este sentido, detallaron que la Argentina tiene 36.000 kilómetros de líneas y que se precisan 40.000 kilómetros. Además, que cada kilómetro cuesta un millón de dólares, lo que significaría 40.000 millones de dólares sólo en redes de transporte. Por último, señalaron que se debe generar un contrato a largo plazo para el uso de la tierra, con los estudios de impacto ambiental.
Gustavo Menna, vicegobernador de la Provincia de Chubut; y Ana Clara Romero, diputada nacional por Chubut, que también participaron del Foro, coincidieron en que se necesitan leyes e institucionalidad. Que las inversiones van hacia donde hay reglas claras. En esa línea, se refirieron a los proyectos de Ley que fueron presentados y aseguraron que el objetivo consiste en impulsar y generar el ecosistema para poder lograr su tratamiento, que hay consenso sobre este tema y que el proyecto cuenta con un gran acompañamiento.
Proyecto de Ley
Natalia Catalano, directora Centro de Transición Energética y Sustentabilidad, UTN-BA, disertó sobre el proyecto de Ley en el que se trabajó desde la Plataforma y lo comparó con el proyecto de Ley presentado por el ex ministro de Economía Sergio Massa. Sobre este punto argumentó que es importante tener estabilidad jurídica e incentivos. Que en el proyecto presentado no hay limitantes para ingresar en el régimen en cuanto a cómo tiene que estar compuesto el equipamiento mientras que indicó que en el proyecto de Massa se pide un mínimo de componente nacional en infraestructura y equipamiento del proyecto.
“La industria del hidrógeno no tiene escala, por ende, no hay proveedores a nivel nacional. Si pedimos un mínimo de equipamiento de producción nacional, es algo restrictivo para el hidrógeno verde. En nuestro proyecto, a las iniciativas que tengan componente nacional se las premia”.
Cadena de valor y oportunidades para las provincias
El cuarto y quinto bloque del Foro estuvo dedicado a la visión de las cámaras industriales, a la planta de hidrógeno de Hychico, y a las empresas del sector de renovables. Annika Klump, de la Cámara Argentino Alemana de Comercio e Industria (AHK), sostuvo que Alemania tiene una necesidad grande de importar hidrógeno, puesto que no tiene recursos abundantes, por lo que hay una intención de querer acompañar el sector. “Las empresas socias de la Cámara quisieran estar más activas, pero necesitan estabilidad fiscal, jurídica, visión y previsibilidad a largo plazo, marco legal. Sin embargo, la versión actual del RIGI no se adapta a la realidad del sector”.
Ariel Pérez, gerente de Energías Renovables de Hychico, habló del desarrollo de la planta y destacó la cadena de valor que se creó en torno a ella. También, dijo que las experiencias de Comodoro Rivadavia permitieron que puedan trabajar con la Unión Europea.
“Ahora resulta fundamental pensar en cómo integrarnos a nuestros vecinos y ser más fuertes. La transición tiene que ser justa. Hay que pensar en la sociedad, en lo que se deja y en el desarrollo territorial, que Puerto le vamos a dar a la comunidad, que va a pasar con el medioambiente. Hace falta del Estado, las empresas y la sociedad en su conjunto. Veo un gran potencial. Queremos que ese potencial se transforme en movimiento», aseguró Pérez.
Ignacio Devitt, de Genneia; Juan Pedro Agüero, de RP Global; Carlos Seijo, de CWP Global; Sebastián Otero, de Fortescue; y Favio Felice, de PCR; analizaron cuáles son las condiciones que posee la Argentina para la producción de hidrógeno y los desafíos que se le presentan en la materia. También, el rol que deberán ocupar las compañías.
Los representantes de las compañías coincidieron en que el RIGI se plantea como un buen punto de partida, pero que también es necesario que exista un marco regulatorio, y una ley de hidrógeno para aprovechar el potencial del sector y promover la inversión.
Cambios en el régimen
Por último, Mariela Beljansky, subsecretaria de Transición y Planeamiento Energético de la Secretaría de Energía de la Nación, expresó: «Fueron muchos años de una mirada diferente que tenemos que ir modificando. Estamos trabajando en la transición. Eso da un mensaje. En más de la mitad de las reuniones que tuve con el secretario de Energía se habló de potenciales inversiones en hidrógeno verde y Gas Natural Licuado«.
Por último, aseguró que «el RIGI, aunque hay que ajustar algunas cuestiones, y la Ley Bases son fundamentales. Nos encontramos trabajando en la propuesta de la Ley de hidrógeno. Estamos haciendo un cambio total para minimizar los riesgos. Trataremos de intervenir lo mínimo e indispensable y haremos un esfuerzo enorme para no obstaculizar a los privados«.