La compañía Blue Sky, una firma canadiense perteneciente al Grosso Group del empresario minero Joseph Grosso, informó una nueva evaluación económica preliminar “positiva” en uno de los yacimientos del proyecto de uranio Amarillo Grande en Río Negro. A partir de los resultados de la campaña exploratoria, la compañía acelerará la realización de un estudio de prefactibilidad.
Los resultados surgen de la campaña exploratoria que Blue Sky viene realizando en el yacimiento Ivana en Amarillo Grande. La compañía avanzó el año pasado con la perforación de pozos con circulación inversa en el depósito Ivana Este, tras haber completado la perforación inicial en los depósitos Ivana Norte y Central.
Con los resultados obtenidos en Ivana Este, la nueva Evaluación Económica Preliminar (PEA) incorpora una estimación de recursos minerales en el yacimiento Ivana, en la que aproximadamente el 80% de los recursos pasaron de la categoría Inferida a la categoría Indicada.
Proyecto líder de uranio
Blue Sky destaca que la PEA demuestra «una economía sólida» para el yacimiento Ivana, que implica 11 años de producción de uranio y vanadio, por lo que se decidió acelerar con un estudio de prefactibilidad.
“Esta PEA reafirma que el depósito de Ivana es un proyecto líder de uranio y vanadio de bajo costo. Creemos que este resurgimiento del mercado de uranio tiene unas sólidas perspectivas a largo plazo y, por lo tanto, nos estamos preparando para completar un estudio de prefactibilidad para Ivana lo antes posible”, afirmó Nikolaos Cacos, presidente y director ejecutivo de Blue Sky.
El ejecutivo añadió que se continuará con el trabajo de exploración en curso “para descubrir y delimitar nuevos recursos de uranio y vanadio a lo largo del restante proyecto altamente prospectivo de Amarillo Grande a escala de distrito».
Yacimiento Ivana
El yacimiento Ivana está ubicado en el extremo sur de las tres áreas objetivo que componen el proyecto de uranio-vanadio Amarillo Grande. La característica principal del desarrollo es que el recurso de uranio está alojado cerca de la superficie. Además de uranio, el proyecto cuenta con vanadio, un metal que se utiliza para la producción de acero.
De concretarse el proyecto, la operación Ivana consistirá de una operación de minería a cielo abierto, con una profundidad máxima de 30 metros. La longitud de la mina será de aproximadamente 3.000 metros con anchos que oscilarán entre 100 y 400 metros.
La minería se realizará con una flota de dos excavadoras (de 5 metros cúbicos), un cargador frontal y siete camiones articulados de 31 toneladas junto con una flota de equipos de apoyo.Los materiales extraídos son gravas y arenas no consolidadas y se excavan libremente, por lo que no se requerirá perforación ni voladura.