El gobierno le otorgó a la petrolera malaya Petronas, socia de YPF en Vaca Muerta, los beneficios económicos, impositivos y cambiarios del Decreto 929, una norma lanzada en 2013 para petroleras que eleven su nivel de inversión en el país, pero nunca había entrado en funcionamiento. La Secretaría de Energía instrumentó la medida mediante la resolución 779/22, publicada este lunes en el Boletín Oficial, donde le otorga a la petrolera asiática “los beneficios del Régimen de Promoción de Inversión para la Explotación de Hidrocarburos” para el área La Amarga Chica, el bloque de shale oil que comparte en sociedad con YPF.
El ministro de Economía, Sergio Massa, en un viaje que realizó a Estados Unidos en septiembre, les prometió a los ejecutivos de las petroleras de ese país que iba a reactivar el decreto que otorga beneficios para invertir en Vaca Muerta. La gigante norteamericana Chevron, que desarrolla el área Loma Campana en Neuquén, es una de las perjudicadas por la no implementación del Decreto 929.
Petronas produce alrededor de 40.000 barriles diarios de petróleo y 1.000.000 de metros cúbicos diarios de gas desde La Amarga Chica y es una de las compañías que más exporta su producción de crudo de la cuenca Neuquina. En septiembre firmó un acuerdo con YPF para realizar un estudio de factibilidad para un proyecto de GNL.
Decreto de 2013
El Decreto 929 fue lanzado por Cristina Fernández en su segunda presidencia para impulsar el incipiente desarrollo de los hidrocarburos no convencionales de la cuenca Neuquina. Si bien fue la primera medida para incentivar el desarrollo de Vaca Muerta, nunca entró en funcionamiento.
El decreto prevé beneficios para las petroleras después del quinto año de iniciada la inversión, que debe ser mayor a US$ 250 millones. Petronas e YPF son socias en La Amarga Chica desde 2014 y en 2018 realizaron el pedido para incorporarse al régimen de beneficios económicos y fiscales de la medida. Llevan invertidos más de US$ 1.000 millones.
La norma habilita a que las compañías puedan exportar el 20% de su producción de crudo y gas sin retenciones y disponer libremente de las divisas generadas por esas ventas al exterior.