(Desde Neuquén).En un contexto caracterizado por la necesidad de ampliar los sistemas de transporte para la evacuación y transporte de petróleo en Vaca Muerta, el gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, visitó la semana pasada las instalaciones de la planta de Oleoductos Trasandinos (OTASA) en Rincón de los Sauces. Allí, se interiorizó de los trabajos que se realizan sobre el ducto que nace en el área denominada Puesto Hernández y llega hasta las refinerías de Chile y de allí al puerto de Concepción, abriendo la exportación a nuevos países a través del Pacífico.
La visita de Gutiérrez coincide con el reinicio del bombeo que la empresa —que es propiedad de Enap, YPF y Unolocal— realizará en vistas al pasaje de la máquina Scraper, la herramienta inteligente que tiene la misión de verificar la integridad del ducto. Esa herramienta se pasará hasta este martes, a lo largo del tramo comprendido entre la cabecera del ducto y el kilómetro 201, que es hasta donde cubre el territorio provincial.
“Queríamos estar presente en estas pruebas del ducto, que desde 2006 que no se utiliza; llevamos 17 años sin que se utilice y ahora empieza a probarse la sistematicidad del caño con este equipamiento. Aproximadamente son dos meses de trabajo y hasta ahora, los ensayos que se han realizado con agua de nuestros ríos y lagos han dado muy buenos resultados”, sostuvo el gobernador.
Gutiérrez explicó que actualmente “se está exportando al vecino país el 5 % de nuestra producción de gas y también nos están esperando para la posible exportación de crudo, y en ese contexto, se está poniendo en valor este tipo de vías de transporte, que permite acelerar el desarrollo de la zona de Rincón de los Sauces, tal el caso de El Trapial con Chevron y el área Narambuena”.
Cuatro etapas y pruebas de despacho
Por su parte, el jefe de la planta de la estación de bombeo de Puesto Hernández, Emiliano Poos, explicó que los trabajos de prueba del ducto se realizarán a través de cuatro etapas: La primera va desde Rincón de los Sauces, Puesto Hernández y Pampa de Trill. De allí se inicia la segunda etapa hasta La Primavera: La tercera va desde La Primavera hasta la estación El Avellano, en Chile, desde allí el último tramo ya en el vecino país.
El ducto, de 16 pulgadas tiene una extensión de 427 kilómetros y no está en funcionamiento desde 2006. El objetivo es rehabilitarlo y así garantizar el despacho de petróleo a Chile, algo que se prevé a partir de 2023.
En esa dirección, la firma definió un cronograma de trabajo, incluidas las tareas en la planta para el despacho de crudo. En tanto que desde el gobierno provincial se puso a disposición el trabajo y acompañamiento de distintas áreas tales como el Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) y las subsecretarías de Recursos Hídricos y de Ambiente.
En septiembre último, la producción de petróleo en la provincia del Neuquén alcanzó los 291.672 barriles por día, el mayor volumen registrado en los últimos 23 años. Esto representa un aumento interanual del 36,42%, un incremento del 4,85 % con respecto a agosto y del 40,16 % en los primeros nueve meses del año.
“Después de 20 años, hay una compañía -Otasa- que tiene a su cargo el oleoducto y que está terminando de hacer las pruebas para poder ampliar la capacidad de transporte a Chile de 115.000 barriles por día de petróleo”, aseguró el gobernador.
Gutiérrez expresó que “es imprescindible poder conectar la producción con la demanda” y explicó que “este año Vaca Muerta ya ha generado 1.500 millones de dólares de exportación: 1.250 millones de dólares por petróleo y 250 millones de dólares por ventas de gas. Va camino a generar sus primeros 2.000 millones de dólares de exportación”.