La pandemia del Covid-19 continúa impactando en todo el mundo y el shale en América del Norte no es la excepción. El gigante proveedor de servicios petroleros Schlumberger acaba de vender OneStim, su negocio de fracking en Estados Unidos y Canadá. La venta de este activo se produce luego de los balances negativos de las petroleras durante el primer semestre. La compañía que adquirió OneStim es Liberty Oilfield Services, una firma de menor envergadura, según informó la agencia Bloomberg.
Schlumberger controla alrededor de un 60% del mercado de servicios petroleros en la Argentina. Fue fundada en Europa, pero se extendió ampliamente en Estados Unidos y en todos los centros Hidrocarburíferos del mundo.
La decisión de Schlumberger de salir del negocio del shale en América del Norte sigue la misma línea de las otras grandes compañías de servicios como Baker Hughes, Weatherford y Halliburton, que se habían corrido de los servicios de fractura.
El boom de los hidrocarburos no convencionales en Estados Unidos que comenzó hace más de una década había mostrado signos negativos en 2019. Pero la pandemia paralizó la actividad económica y cayó a niveles históricos la demanda de energía. En ese contexto, Schlumberger, el mayor proveedor de servicios petroleros del mundo, sufrió en el segundo trimestre del año una caída del 40% de sus ingresos.
Esto provocó la venta de su negocio de fracking OneStim, un activo que le había comprado a Weatherford por 430 millones de dólares en 2017. Además, Schlumberger anunció planes para recortar a más de 21.000 trabajadores y reorganizar su negocio en todo el mundo.