La integración de los activos de BP y Bridas es una jugada estratégica que estaba en agenda de ambas compañías desde que la segunda –propiedad de la china CNOOC y la familia Bulgheroni- adquirió la refinería y la red estaciones de servicio de Esso (ExxonMobil) en 2012. Esta es, de hecho, la tercera vez que las empresas encaran un intento de fusión, según indicaron a EconoJournal fuentes cercanas a la operación. Las otras dos se abortaron antes que las partes pudieran materializar el proceso en un acuerdo formal. El perfeccionamiento final de los documentos firmados este fin de semana en Europa por BP y Bridas demandará algunos meses.
El proceso dará origen a una nueva empresa, que se llamará Pan American Energy Group y, a priori, no estará listada en la bolsa. Su capital accionario estará distribuido de la siguiente manera: 50% en manos de BP y 50% en poder de Bridas Corporation (25% de CNOOC y 25% de la familia Bulgheroni). En la práctica, BP resignará un 10% de PAE –hoy posee un 60%- para obtener un 50% de Axion Energy, la compañía que heredó los activos de Esso. La operación no prevé el intercambio de dinero. Se estructurará solo a través de un swap interno de acciones entre las empresas.
¿Qué cambió en el escenario para que esta vez la fusión prospere? El alineamiento de los intereses de los actores involucrados obedece a la combinación de factores globales y locales.
Con los precios internacionales amesetados en los 50 dólares, el downstream va camino a convertirse nuevamente en un segmento apetecible para los grandes productores, que a principios de esta década habían enfocado su negocio en el upstream para aprovechar los altos precios del crudo. En esa clave de lectura, desembarcar en AxionEnergy –hasta ahora propiedad de Bridas- tiene cierto atractivo para BP, que hasta ahora estaba presente solo en PAE. La petrolera británica cuenta con el 60% del capital accionario de la productora, pero el managment es controlado fundamentalmente por la familia Bulgheroni. Al ingresar en Axion, BP está integrando su negocio petrolero en la Argentina. Bridas ya corría con esa ventaja.
La fusión entre BP y Bridas encauzará, a su vez, ciertas disputas comerciales lógicos entre ambas compañías ligadas al precio de venta del crudo que PAE le vende a Axion Energy. La petrolera es el mayor proveedor de petróleo de la refinería de Campana. BP, que sólo tiene presencia en PAE, quiere maximizar el valor de venta del petróleo entregado a Axion. Bridas, por el contrario, defiende también el negocio de la refinería, que se beneficia cuando el precio del crudo es más bajo. “Desde BP han cuestionado a Bridas por ‘autovenderse’ el crudo Escalante que procesa en su refinería de Campana más barato que al resto del mercado para elevar el margen de ganancia del downstream. Son discusiones lógicas entre socios con intereses diferentes”, explicaron fuentes empresariales. Desde esa óptica, el ingreso de BP al segmento de refinación sería un movimiento defensivo, dado que tendrá el 50% de participación tanto en PAE como en Axion.
Para la familia Bulgheroni, por su parte, la integración cristaliza su poder dentro del grupo. Pese a ser uno de los socios minoritarios, los empresarios argentinos seguirán controlando la conducción del alto managment de PAE y Axion, tal como sucedió hasta ahora. La fusión permitirá licuar los ‘ruidos’ con su contraparte británica y proyectarse a futuro desde una plataforma más robusta y confiable. Al cumplirse un año de la muerte de Carlos Bulgheroni, líder y principal exponente de Bridas, el grupo –que hoy es liderado por Marcos, hijo de Carlos, y Alejandro Bulgheroni- pasará a controlar una de las mayores petroleras de capital privado de América latina.