Las principales refinadoras, con YPF a la cabeza, aumentaron un 4,5% los combustibles desde el viernes a la medianoche. El porcentaje que finalmente se trasladó a los precios en los surtidores fue menor a lo que venían demandando las petroleras por el impacto de la devaluación y la inflación. Ahora, el gobierno amplió el régimen que desgrava la importación de combustibles a las refinadoras integradas y no integradas como una compensación adicional hacia las empresas.
La novedad se conoce el primer día hábil posterior al aumento de 4,5% en los precios de la nafta y el gasoil que aplicaron las petroleras el fin de semana. El ajuste se implementó una semana antes de lo previsto y la especulación en el mercado fue que hubo una luz verde para que lo hicieran este fin de semana para que, en la medida de lo posible, las subas pasaran desapercibidas en medio de la inauguración del gasoducto Néstor Kirchner y el enorme operativo propagandístico desplegado por el gobierno y por YPF para difundirlo.
En concreto, el gobierno prorrogó el Régimen de Incentivos al Abastecimiento Interno de Combustibles (RIAIC), una medida que le otorga beneficios impositivos a las refinadoras que importan naftas y gasoil. Lo hizo mediante la resolución 570/2023 publicada este lunes en el Boletín Oficial con la firma de la titular de la Secretaría de Energía, Flavia Royón. En la última norma la desgravación contemplaba los meses de enero y febrero y ahora se extendió a marzo y abril.
La medida afecta a las importaciones de gasoil grado 2 y 3 y tiene un límite para el otorgamiento del beneficio en hasta un 20% de los volúmenes importados. En cambio, para las naftas grados 2 y 3 el límite es de 17% para los volúmenes importados.
Régimen
El RIAC fue un régimen implementado en junio de 2022 por el decreto 329 y continuado con el decreto 86 de febrero de este año y eximen del cobro de los Impuestos a los Combustibles Líquidos (ICL) y al Dióxido de Carbono (IDC) para las importaciones de naftas y gasoil. El objetivo de la medida fue contrarrestar la faltante de combustibles en el país, sobre todo de gasoil, y asegurarse el abastecimiento en el mercado local, afectado por los inconvenientes que provocó la guerra en Ucrania en el sector hidrocarburífero. La resolución de este lunes afirma que “las condiciones que dieron origen al dictado de los mencionados decretos se observaron también durante el segundo bimestre del año 2023”.
La medida beneficia a las refinadoras integradas como YPF y Axion Energy y a las no integradas, como Raízen (Shell) y Trafigura (Puma), que podrán solicitar un monto equivalente a la suma de lo que tengan que pagar en ICL y al IDC de las importaciones de gasoil y naftas. La Argentina tiene que importar todos los años volúmenes de combustibles para abastecer el mercado interno porque con la capacidad instalada de las refinerías no se llega a cubrir los picos de consumo del país.
El RIAC comprende también a las Pequeñas Refinerías de Regiones Afectadas – PReRA- “ubicadas en regiones con insuficiencias de abastecimiento interno de gasoil y/o naftas superiores a la media nacional por motivos relacionados a su ubicación geográfica”.