El interventor del Ente Nacional del Gas (Enargas), Federico Bernal, negocia con distribuidoras y transportistas avanzar con un listado de obras pendientes destinadas a expandir el servicio. “Desde la Intervención buscamos avanzar rápidamente en llevarle el gas a todos los argentinos y las argentinas”, aseguró en un comunicado difundido a comienzos del mes pasado cuando les pidió a las empresas que presenten sus prioridades. Lo que todavía no está claro es cómo van a financiarse.
Las obras en carpeta
Enargas ya identificó incluso una serie de proyectos a impulsar entre los que sobresalen:
- Gasoducto Norte en la provincia de Santa Cruz, que se conecta en la localidad de Rio Mayo, Chubut, y abastece a las localidades de Perito Moreno y Los Antiguos en Santa Cruz;
- Gasoducto Sur en Mendoza;
- Gasoductos La Cruz y Ballesteros en Córdoba;
- Gasoducto de la Costa en el sur de la Provincia de Buenos Aires;
- Refuerzo del último tramo del Gasoducto Regional Sur, en la provincia de Santa Fe, para mejorar el abastecimiento a la localidad de Venado Tuerto.
En una entrevista con Ámbito Financiero, Bernal sumó también al listado el gasoducto Mercedes-Cardales, ampliaciones sobre el gasoducto San Martín, y otro gasoducto en Catamarca. “Le he comentado al Presidente que existen aproximadamente unos 150 millones de dólares de caños y equipos ya comprados y pagados que se pueden utilizar. Esto porque Aranguren paró las obras de ampliación y no previó su destino. Estamos trabajando con las transportistas y las distribuidoras, pero también con los gobiernos provinciales y municipales”, aseguró el funcionario.
Las obras de infraestructura son indispensables para garantizar la expansión del servicio, pero sorprende que no sea la secretaría de Energía la que esté coordinando esa tarea. El secretario Sergio Lanziani está marginado de la toma de decisiones y ese espacio en los hechos está siendo ocupado por Bernal, quien pese a encabezar un organismo de perfil más técnico, viene realizando declaraciones públicas y se mueve como si fuera la máxima autoridad del sector del gas.
El domingo pasado incluso el Enargas estrenó en su cuenta de Twitter un spot publicitario de un minuto, con imágenes de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kircher, donde podía leerse que “estamos trabajando en la creación de nuevas delegaciones y subdelegaciones a lo largo del país para trabajar desde el propio terreno en la expansión de la red de gas”.
Financiamiento sin definición
Lo que todavía no está resuelto es de donde van a salir los recursos para avanzar con esas obras en un contexto de congelamiento tarifario. Bernal les solicitó a distribuidoras y transportistas el mes pasado que le detallen cuál es la asistencia financiera que van a requerir de acá a fin de año para garantizar el servicio. Las empresas precisaron qué monto necesitan, pero fuentes de la industria aclararon a EconoJournal que en las cifras elevadas no se contempla dinero para obras.
EconoJournal publicó a fines de junio que el gobierno estaba evaluando autorizar a las distribuidoras gasíferas a cobrar un cargo extra en la factura de gas destinado a financiar inversiones y gastos corrientes en medio de la crisis. La propuesta la acercó la Asociación de Distribuidores de Gas (Adigas), quien sugirió crear un fondo, al que denominan informalmente como Focegas, financiado por un cargo fijo de 200 pesos en cada una de las facturas.
“El Focegas es una idea que estamos trabajando en el ente. Nos gustaría porque consideramos fundamental reactivar las obras paralizadas por la administración anterior. Consideramos neurálgico que se reactiven todas esas obras”, aseguró entonces Bernal a EconoJournal, pero aclaró que eso no significaba que estuviera avalando el aumento de 200 pesos propuesto por Adigas.
Luego EconoJournal reveló una propuesta del propio Bernal consistente en aplicar una rebaja nominal de las tarifas de gas de hasta un 22% para los clientes residenciales en los meses de julio, agosto y septiembre. La iniciativa contempla un incremento de subsidios de hasta 10.000 millones de pesos que se cubriría con lo que el Estado nacional se ahorre al dejar de pagarle a las petroleras las cuotas por las diferencias cambiarias que se generaron luego de la devaluación de 2018 y que el gobierno de Mauricio Macri asumió como deuda a través del decreto 1053/18. En ese documento Bernal reveló además que pedirá la anulación de la Revisión Tarifaria Integral.
El propio interventor confirmó este martes en Ámbito Financiero que trabaja en un plan para rebajar las tarifas. “Estamos trabajando en propuestas que signifiquen una disminución en las facturas que pagarán los usuarios y las usuarias este año en los meses de invierno, vía descuentos en el precio del gas”, aseguró. El gobierno deberá moverse rápido si quiere implementar la propuesta de Bernal, pues este mes ya corresponde abonar las facturas de julio.