La suba de la cotización internacional del crudo y la fuerte suba del dólar de los últimos meses han potenciado la necesidad de una mayor cantidad de pesos para hacer frente al subsidio que este año debe afrontar la estatal IEASA -Integración Energética Argentina Sociedad Anónima- (ex ENARSA). El presidente de la compañía, Hugo Balboa, estimó que rondarán los 29.000 millones de pesos, casi el doble de los 14.800 millones aplicados en 2017.
La diferencia surge de comparar los precios promedios de importación y de producción local del gas, con los precios que IEASA cobra por dicho insumo con destino a usuarios residenciales y a usinas generadoras de electricidad. En diálogo con periodistas, Balboa explicó que el precio promedio que IEASA ingresa por el gas que suministra es de 4,30 dólares por millón de BTU, en tanto que se está comprando gas a Bolivia a 6,2 dólares por millón de BTU, se paga 7,40 dólares promedio por el Gas Natural Licuado (GNL) que llega en barcos y es regasificado en puertos, y hasta 10,50 dólares por millón de BTU por el gas que se ingresa desde Chile, regasificado en el país trasandino.
“Si había que aumentar tarifas con un dólar a 20 pesos, ¿cómo no hacerlo con un dólar a 25 pesos?”, comentó Balboa para graficar la situación, haciendo hincapié además en que el barril del petróleo Brent, que se toma como referencia Argentina, subió de 50 a más de 70 dólares en el último año.
El funcionario detalló a EconoJournal que IEASA subsidia a todos los usuarios de gas que acceden a la Tarifa Social, y a los usuarios patagónicos, que cuentan con tarifas diferenciales por razones climáticas. Y destacó que el mayor precio ingresado por IEASA por el gas es de 5,50 dólares por MBTU y corresponde a las ventas de este insumo a Cammesa para la generación de electricidad.
Así las cosas, el funcionario no arriesgó opinión acerca de qué criterio se seguirá en el gobierno nacional respecto del necesario incremento del volumen de subsidios en pesos, ocurrido por la revalorización del dólar y el aumento del precio del crudo a nivel internacional, que resultó casi simultáneo con la decisión del gobierno de desregular la comercialización de los hidrocarburos en el mercado local, y eliminar progresivamente los subsidios a las tarifas de los servicios públicos. Balboa sí puntualizó que un incremento de la producción interna del gas natural convencional y no convencional, redundará en menos importación del insumo y, consecuentemente, en menores precios.
Las importaciones
Acerca del cuadro de operaciones a cargo de IEASA respecto de la importación de gas, el funcionario explicó que “Bolivia debería estar entregando 20.3 millones de metros cúbicos día, pero por limitaciones de producción nos está entregando 1,3 millones diario menos”.
En cuanto al GNL, Balboa detalló que “ya hay 40 cargamentos contratados en barcos que llegarán hasta fines de julio, otros 10 en curso de contratación para descargar en el mismo período, y vamos a licitar 8 más para el suministro en agosto y setiembre”. De manera que totalizarán 58 cargamentos, varios menos que los del año pasado.
En cuanto al GNL regasificado en Chile y comprado por Argentina, Balboa explicó que “se está negociando un acuerdo por hasta 93 millones de metros cúbicos, en un esquema de provisión interrumpible, a un precio que rondará los 10,50 dólares por MBTU”.