Si se toman en cuenta las subas que registraron el precio del dólar y el barril de crudo desde el último aumento de los combustibles, el nuevo ajuste debería ser de 8% en las naftas y 3% en el gasoil, según reconocieron a EconoJournal fuentes del mercado. La semana pasada, YPF, que marca el paso entre las petroleras a raíz de su poder de mercado, dejó trascender que quiere esperar a que se estabilice el valor de la divisa estadounidense, antes de avanzar con una nueva remarcación, pero la situación se va evaluando día a día y esta semana podría haber novedades.
El último aumento se aplicó el sábado 2 de diciembre. Fue de un 6% en promedio. Desde entonces en las estaciones de YPF del Área Metropolitana de Buenos Aires el litro de nafta súper cuesta $22,66, la Premium 26,15, el litro de diésel $19,99 y el diésel Premium $23,18. En 2017, el incremento acumulado en el precio de la nafta súper fue de 32,6 ($17,08 a $22,66) y el de la Premium de 35,5 por ciento ($19,30 a $26,15). A su vez, el gasoil común subió 28,6 por ciento ($15,54 a $19,99) y el premium un 29,8 por ciento ($17,85 a $23,18).
Cuando se aplicó ese último aumento, el barril de petróleo tipo Brent, que se toma como referencia tanto para el crudo Medanito (cuenca neuquina) como para el Escalante (golfo de San Jorge), cotizaba u$s 63,73 y el viernes pasado cerró a u$s 67,62, un 6,1 por ciento más. El dólar mayorista, por su parte, había cerrado $17,23 y el viernes llegó a $18,92, un 9,8 por ciento más alto.
Fuentes del mercado aseguraron a EconoJournal que si el crudo Brent se mantiene en esos valores y el dólar mayorista oscila en torno a $19, el ajuste en el precio de la nafta debería llegar al 8%. Ese ajuste elevaría el litro de súper que vende YPF en Capital Federal y el conurbano a $24,47, mientras que el litro de Premium podría llegar a $28,2. En el caso del gasoil debería ser menor y estaría en torno al 3 por ciento.
Eso no significa que los combustibles vayan a subir a esos precios sí o sí porque hay que ver en qué punto se ubican esas variables el día que YPF decida aplicar el aumento. Además, la petrolera controlada por el Estado Nacional podría tomar la decisión de aumentar los precios un porcentaje menor.
Cómo YPF controla más del 50% del mercado, el resto de las petroleras están a la espera de que la firma comandada por Miguel Ángel Gutiérrez dé el primer paso ya que si deciden aumentar por su cuenta perderían marketshare frente a la compañía líder del sector, que conservaría los precios más bajos.
Un consultor del sector que conversó con EconoJournal aseguró que si el mercado es libre las naftas deberían subir ese 8%. “Si el gobierno en verdad se preocupa por la suba de las naftas, lo que debería hacer es dejar de incentivar la demanda eliminando la alícuota del 10% que gravaba a los OK de gama media al mismo tiempo que incrementa los impuestos a los combustibles”, señaló.