Puestos en una hoja de cálculo, los números oficiales que maneja el Gobierno para orientar la actividad económica este año parecen hablar por sí mismos, por ejemplo, en el sector de hidrocarburos.
En un marco político que promociona la reducción del déficit fiscal a través de un achicamiento paulatina del gasto público, tal como sostuvo el presidente Mauricio Macri e insistió el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, el sector petrolero recibirá en 2017 transferencias millonarias por parte del Estado con un objetivo específico: apuntalar la producción nacional de gas, el principal insumo de la matriz energética local, que hace notar su escases, en especial en los meses de invierno.
De los $ 16.000 millones que tiene disponibles este año el denominado programa 29 (Planificación y coordinación estratégica del plan nacional de inversiones hidrocarburíferas), casi $ 14.000 millones estarán destinados a esa tarea. De ese total, a su vez, $ 12.766 millones irán específicamente al Programa de Estímulo a la Inyección de Excedente de Gas Natural, más conocido como Plan Gas. Se trata de una creación del kirchnerismo que continuó el macrismo y tiene como objetivo garantizarle un precio mínimo al gas nuevo que producen las grandes petroleras del país, con YPF a la cabeza.
Otros $ 1.416 millones irán a cubrir un programa de similares características, pero hecho a medida de compañías con menor volumen de producción. Así surge de números oficiales.
Los subsidios a la oferta de gas, que quedan en manos de algunas de las mayores petrolerlas del país (a la empresa de mayoría accionaría estatal se suman otras, como la francesa Total) es parte de la apuesta oficial, liderada por el ministro de Energía, Juan José Aranguren, de reducir paulatinamente la dependencia argentina de la importación de gas. Si bien en la actualidad los precios bajos del crudo y sus derivados le trajeron alivio a las cuentas públicas, las fuertes erogaciones para improtar energía fueron uno de los problemas que enfrentó el kirchnerismo y condujeron al cepo cambiario, padre del cierre de la economía.
Pese a los fuertes subsidios que recibirán este año las petroleras y el aumento de tarifas previsto para 2017, las mayores subvenciones seguirán en cabeza de los usuarios domiciliarios de electricidad. Este año, el Estado los subsidiará con casi $ 100.000 millones.