Pese a la suba de tarifas aplicada por el gobierno de Javier Milei durante el primer semestre, las tarifas eléctricas para los usuarios residenciales en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) continúan siendo una de las más bajas de América del Sur.
La factura con impuestos de un hogar que consume 100 KWh mensuales es de US$ 0,19 por KWh en promedio quedando por detrás de lo que se paga en Uruguay (US$ 0,37), Perú (US$ 0,23) y Brasil (US$ 0,24) y por delante de Chile (US$ 0,15), Colombia (US$ 0,15), Bolivia (US$ 0,11) y Paraguay (US$ 0,05). No obstante, en el AMBA las tarifas se ubican por debajo del promedio nacional.
Las tarifas del AMBA
Los usuarios residenciales de altos ingresos (Nivel 1) abonaron en junio US$ 0,13 por KWh promedio en AMBA, superando solo los hogares de Bolivia (US$ 0,11) y Paraguay (US$ 0,05), según detalla un informe elaborado por la Usina para el Desarrollo Energético Argentino (Udea) y la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica de la República Argentina (Adeera). Es importante aclarar que el trabajo no toma en cuenta cuánto representa ese gasto con respecto a los ingresos promedio de cada país y solo compara tarifas medidas en dólares.
Los usuarios de ingresos medios (Nivel 3) pagaron en junio solo US$ 0,07 por KWh y los usuarios de ingresos bajos (Nivel 2) US$ 0,06, siendo superados por todos los hogares de la región, salvo los de Paraguay que abonan US$ 0,05 por KWh. Esta comparación evidencia el atraso que arrastraba la tarifa de luz en el AMBA, pues hasta junio los hogares N3 habían acumulado un incremento interanual de 745% y los N2 de 690%, según un informe de las consultoras Economía & Energía y PxQ.
Las tarifas del resto del país
Si la comparación se realiza con la factura promedio que se paga en el resto del país la brecha se reduce. Un N1 fuera del AMBA paga en promedio US$ 0,20 por KWh, superando no solo a Paraguay (US$ 0,05) y Bolivia (US$ 0,11) sino también a Colombia (US$ 0,15) y Chile (US$ 0,15).
Un N3 fuera del AMBA paga US$ 0,14 por lo que queda por detrás de todos los países menos de Bolivia (US$ 0,11) y Paraguay (US$ 0,05), mientras que para un N2 la situación es similar porque abona US$ 0,12 por KWh.
La diferencia entre las tarifas del AMBA y las del resto del país se explica por el mayor Valor Agregado de Distribución (VAD) que pagan los clientes provinciales, pues el valor mayorista de la energía es el mismo para todos los usuarios, aunque segmentando de acuerdo al poder adquisitivo.
7 Responses
Deberían relacionar las tarifas en dólares con los salarios medios de la región
Hay que ser muy cínico para poner ese título engañoso.explico no se puede comparar nuestro desarrollado sistema energético con Otros paises y con semejante desarrollo somos los más baratos aún más baratos deberían ser señores Cínicos.
Que mal trabajo que realizan, so. De cuarta, despidan al que escribió está nota y al que la publicó y al que contrato a esos dos!! Para determinar si es barato deben considerar el salario.
Cuánto ganan en dólares en otros países de la región, cuánto ganamos acá, cuánto del sueldo se destina a servicios y en base a ese cálculo correspondería comparar, pero no… Hay que decir solamente que son bajos… Fantoches
Esta nota con tanta demostracion y esfuerzo es realmente comica. Siempre se debe contrastar el ingreso con el egreso. Es inutil demostrar esto.
AQUI NO SE GANA EN DOLARES. No se enteraron ??
Quisiera recordar a todos los anteriores «opinantes» que 20 (veinte) años de fijar tarifas, valores, ingresos y egresos de toda la cadena economica y financiera por «genios» de escritorio se ha obtenido como resultado una distorsion fenomenal en toda la economia, incluyendo los salarios. La energia tiene un valor mas o menos igual en todo el mundo, ignorando estos «genios» que nos gobernaron que en el caso de la generacion electrica se requieren capitales inmensos y en dolares, euros, yen o Yuanes lo que mas les guste. Mientras tanto los «opinologos» solo opinan no arriesgan sus bolsillos y otros patoteros hasta nos han quebrado (ej) USD 16.000 millones con YPF
Esa «distorsión fenomenal de toda la economía» a la que usted se refirió, criticando a los «preopinantes» (que así se los llama…) fue la que permitió que no hasta hace tanto tiempo, la Argentina tuviera un 60% de clase media. Y no era distorsivo: se ganaba mejor en dólares (el salario más alto de América Latina) y los subsidios funcionaban como un complemento indirecto del salario. Eso hacía que la gente, indirectamente, ganara un poco más y las empresas un poco menos, sin que se fundieran ni mucho menos, por supuesto.
Lo que hay que determinar son los COSTOS de la producción de gas y petróleo y, a partir de ahí, establecer una ganancia. Si un país tiene gas y petróleo, sus habitantes no tienen por qué pagarlo a precio de commodity. Eso lo pagarán los países a los que se lo exporte. En el propio país, se debe pagar lo que cuesta realmente más una ganancia, no cualquier precio.
Y lo de los USD 16.000 dólares de YPF es una truchada. La jueza toma el estatuto de YPF por sobre la ley de expropiación. O sea, viola el principio de orden de importancia legal: una ley siempre está por encima de un estatuto empresario. Pero, ¿por qué hace eso? Porque renunciamos a nuestra soberanía jurídica y nos allanamos a la de Nueva York. Hay que terminar con eso de raíz porque, si no, jamás vamos a poder salir adelante. Eso es lo que se estableció con el RIGI, que nos llevará directo a ser como Eritrea…