El gobierno financiará parte de la obra de la reversión del Gasoducto Norte, clave para abastecer las provincias del Noroeste Argentino (NOA), con fondos de Cammesa, la compañía que administra el mercado eléctrico mayorista, tal como publicó EconoJournal. Cammesa aportará alrededor de US$ 200 millones que recaudó de las exportaciones de energía eléctrica a Brasil en los veranos de 2022 y 2023. Este medio accedió a la resolución 606 firmada por la secretaria de Energía, Flavia Royón, que instruye a Cammesa y a Enarsa a “realizar una operación de crédito reintegrable” al 30 de junio, para “garantizar la disponibilidad de la totalidad de los fondos necesarios para ejecutar la obra Proyecto de Reversión del Gasoducto Norte – Obras Complementarias al Gasoducto Presidente Néstor Kirchner”.
La licitación para la obra de reversión debería lanzarse la semana que viene, según anunció el propio ministro de Economía, Sergio Massa, en la inauguración del Gasoducto Néstor Kirchner en Salliqueló. El gobierno intentó avanzar con un mecanismo regulatorio para viabilizar el financiamiento del sector privado para la reversión, centralmente con aportes de los productores de gas. Pero, finalmente, avanzará con aportes de Cammesa para completar la ingeniería financiera.
La obra para la reversión del ducto troncal demandará una inversión de US$ 750 millones, según la cartera energética. El grueso de los fondos saldrá de un crédito aprobado de la Corporación Andina de Fomento (CAF), que suma US$ 540 millones. En tanto, Cammesa solventará el monto restante a partir de las exportaciones de energía recaudados por el Fondo de Estabilización del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) creado por la resolución 1.037 de la cartea energética de octubre de 2021.
El artículo 2 de la resolución 606 a la que accedió EconoJournal y que se publicará en breve instruye a Enarsa “a llevar en una cuenta de asignación específica en el fideicomiso denominado Fondo de Desarrollo Gasífero (FONDESGAS), todos los movimientos y operaciones relacionados a la operación de crédito”.
Reversión
El cambio de sentido del Gasoducto Norte para que el fluido vaya de sur a norte es una obra clave para el abastecimiento del centro y norte del país. El objetivo es reemplazar el declino de las importaciones de gas de Bolivia con producción de Vaca Muerta, que tiene un precio hasta 70% menor, según explica la resolución 606. Además, advierte que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) informó formalmente a Enarsa que “no estará garantizado el abastecimiento en firme de gas natural y que desde la fecha citada el servicio pasará a condición de interrumpible en su totalidad”.
En los hechos, la Argentina necesita avanzar cuanto antes con las obras de la reversión del Gasoducto Norte, que va desde el sur de Córdoba al límite con Bolivia para llegar al próximo invierno con el abastecimiento de gas producido en Neuquén. Para esto, deberá avanzar no sólo con la obra, sino, también, con la licitación de los caños que se necesitan para construir un gasoducto de 36 pulgadas de diámetro y 122,5 kilómetros de extensión desde la planta compresora La Carlota del gasoducto Centro Oeste hacia la de Tío Pujio sobre el Gasoducto Norte.
La primera etapa de la reversión podrá incorporar 19 millones de metros cúbicos de gas diarios (MMm3/d) y el objetivo es que esté habilitada para el invierno de 2024. La segunda etapa de la reversión incorporará una capacidad adicional de transporte de gas para llegar a 29 MMm3/d. Además del ducto entre La Carlota y Tío Pujio, el conjunto de obras de la reversión incluye 62 kilómetros de loops de 30” sobre el Gasoducto Norte hasta la localidad de Ferreyra y trabajos de reversión de inyección de las plantas compresoras Ferreyra, Dean Funes, Lavalle y Lumbrera.