El gobierno apeló a una propuesta novedosa —aunque de dudosa efectividad— para gestionar la escasez de dólares que diariamente esquila las reservas del Banco Central. Con el objetivo de reducir las erogaciones que se llevará la importación de combustibles durante el invierno, uno de los grifos que más divisas demanda en este época del año, funcionarios del área energética ofrecieron a proveedores internacionales de gasoil cancelar el pago de los barcos que arribarán al país entre mayo y junio con yuanes en lugar de abonarlos en moneda estadounidense. Es la primera vez que se propone un esquema de este tipo, que obviamente está apalancado en el swap con China que activó la administración del Frente de Todos.
La propuesta, confirmada a EconoJournal por tres fuentes privadas sin contacto entre sí, descolocó a traders y petroleras multinacionales que se adjudicaron el aprovisionamiento de gasoil para el parque de centrales termoeléctricas que despacha Cammesa, la compañía controlada por el Estado que administra el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM).
Los tomó por sorpresa no sólo porque los contratos originales de venta están expresados en dólares, sino porque el ofrecimiento que trasladaron directivos de Cammesa se concretó sobre la marcha, incluso a punto de que los proveedores empiecen a descargar el gasoil en la rada del Río de la Plata. A raíz de eso, la mayoría declinó del ofrecimiento, aunque al menos dos compañías pidieron más detalles para entender cómo se instrumentaría la operación.
Fragilidad manifiesta
Lo concreto es que la situación expone una vez más la fragilidad cambiaria que enfrenta el Ejecutivo. Si bien en los últimos 12 años los gobiernos enfrentaron distintos grados de dificultad para cancelar las importaciones de gasoil y LNG, la falta de dólares está afectando esta vez, como nunca antes, el cronograma de pagos de las embarcaciones de combustibles líquidos y Gas Natural Licuado (LNG).
La oferta de pagar en moneda china cargamentos de gasoil que se compraron en dólares es un ejemplo de esa precariedad. Otro es que la estatal Enarsa, que está a cargo de la importación de cargamentos de LNG, pagó ligeramente fuera de plazo —con una demora de dos días— algunos cargos de gas que se compraron para la terminal de Bahía Blanca. De hecho, existen dudas entre traders acerca de si podrá pagar la cuota del esquema de pre-pago (pago anticipado) que vence el 20 de mayo.