La Secretaria de Energía, Flavia Royon, anunció la actualización de tarifas en el marco del esquema de la segmentación de tarifas para el 2023. En abril y junio habrá dos aumentos en las facturas de los usuarios residenciales.
Para los consumidores nucleados en el Nivel 2 -de ingresos bajos y beneficiarios de la tarifa social – y en el Nivel 3 -de ingresos medios- el incremento en las facturas será de $ 360, en cada cuota. Para los usuarios del Nivel 1 – de altos ingresos- el aumento también será de forma escalonada y los incrementos llegarán a los $ 410. Durante los últimos días de octubre se realizará una nueva audiencia pública para evaluar las tarifas y las inversiones que precisan las empresas para brindar el servicio.
Hasta el momento, finalizaron las dos primeras etapas de la segmentación tarifaria, correspondientes al período septiembre-diciembre de 2022, lo que implicó un retiro del 40% de los subsidios para no inscriptos y altos ingresos. El ahorro fiscal de esa primera etapa significó un total de $ 40. 000 millones de pesos.
Cómo será la política tarifaria para 2023
Royón exhibió que para los usuarios comerciales que consumen 800 kW/mes no habrá aumentos. «Para el 49% de los usuarios residenciales y pequeños comercios el aumento en el Precio Estacional de la Energía es de $0» aseguró la funcionaria. Y agregó «vamos a respetar el espíritu del decreto presidencial de que los salarios les ganen a las tarifas». En cambio, para aquellos segmentos de altos ingresos o quienes no solicitaron el subsidio, se va a efectuar una quita del 40 %. Para el segmento de ingresos medios, la quita será del 20 %. Por esto, las subas del precio de la energía van a estar entre el 0 y el 36 % considerando a los grandes comercios.
Sobre esto, la secretaria de Energía planteó “el 2023 va a ser un año de transición en donde se van a requerir importaciones de energía. Hacia 2024 y 2025 vamos a tener una matriz energética más competitiva con gas argentino. Tenemos que seguir cuidando la energía. No vamos a tener aumentos hasta octubre para los segmentos de bajos ingresos. Vamos a seguir acompañando a los pequeños comercios”.
Asimismo, Royón agregó: “Esta política consolida el orden fiscal: en 2023 se prevé como meta fiscal un 1,6 % del PBI. Vamos a cumplir con eso”. “Aún resta un 33% del universo de usuarios de electricidad que no han solicitado el subsidio. Hoy la prioridad es detectar dentro de este porcentaje a aquellos usuarios de niveles bajos o medios que aún no se anotaron, para poder garantizar la equidad del sistema de segmentación que se encuentra vigente, y no perjudicar a los hogares de menores ingresos”, sostuvo.
En la segunda etapa de la segmentación el 68% de los usuarios residenciales no tuvo suba de tarifas. En 2023 se continuará con el proceso de segmentación y se avanzará con la tercera etapa en la reasignación de los subsidios. Por esto, continúa abierto el formulario de inscripción en argentina.gob.ar/subsidios
Las tarifas del AMBA
En el anuncio, Royón estuvo acompañada por el interventor del ENRE, Walter Martello, quien explicó que el objetivo es “proteger a los hogares de mayor vulnerabilidad e ingresos medios”. Con respecto al aumento del Valor Agregado de Distribución (VAD), explicó “no podemos otorgar el aumento que las empresas pretenden porque alteraría muchísimo la relación entre los ingresos familiares y el costo de las tarifas”.
En la última audiencia pública celebrada el 23 de enero, las distribuidoras que habían reclamado formalmente una recomposición tarifaria de 262%. Frente a esto, Martello manifestó “las empresas no van a tener el aumento que pretenden, sino el que las familias puedan pagar”.
Por último, destacó que también es necesario contemplar y considerar las inversiones que las distribuidoras tienen que hacer para brindar un servicio seguro y eficaz, por eso adelantó que “en octubre se celebrará una audiencia con el objetivo de poner considerar esas cuestiones”.