Oldelval está en plena recta final de la firma de los contratos con los empresas productoras de petróleo en Vaca Muerta para terminar de oficializar la puesta en marcha del proyecto Duplicar Plus, que permitirá sumar 50.000 metros cúbicos (m3) a la capacidad de la red de oleoductos que conecta Neuquén y Buenos Aires. El complemento obligado de esa iniciativa es la ampliación de la terminal que Oiltanking Ebytem posee en Puerto Rosales, donde recepciona, almacena y despacha el petróleo que proviene desde la cuenca Neuquina. Fuentes de la compañía aseguraron a EconoJournal que la obra que se empezará a construir en las próximas semanas elevará la capacidad de almacenaje de la terminal de Oiltanking en Puerto Rosales hasta los 250.000 m3, un 50% más de lo disponible actualmente. La inversión prevista es de 312 millones de dólares.

Al mismo tiempo, Oiltanking empezará a trabajar a partir de enero en los estudios de ingeniería básica de otra iniciativa para sumar un sexto tanque y poder trabajar con 300.000 m3 de almacenaje. Eso implicaría, además, trabajar en forma simultánea con un muelle con dos posiciones y una monoboya de exportación. Si este proyecto, que aún está dando sus primeros pasos prospera, la inversión se elevaría hasta los 500 millones de dólares.

Ampliación

Las instalaciones de exportación operativas en la actualidad son dos monoboyas giratorias para el atraque de grandes buques petroleros, denominadas Punta Ancla y Punta Cigüeña, ubicadas entre las boyas 19 y 21 del canal principal de acceso. Estas boyas se encuentran vinculadas a tierra firme por una cañería submarina de 2.000 metros de longitud que las conecta con una planta de 18 tanques (con una capacidad de almacenaje de 480.000 m3) y un oleoducto a través del cual se bombea el crudo hacia las refinerías instaladas en La Plata, donde se lo industrializa. Las monoboyas son administradas por Oiltanking, que se encarga también del almacenaje y bombeo del petróleo.

La empresa, controlada por la alemana Oiltanking GmbH con un 70% de las acciones y la petrolera YPF, que tiene el 30% restante, viene trabajando hace más de un año en un ambicioso plan de ampliación para escalar la terminal hasta los 250.000 m3 de almacenaje. El plan contempla, además, un cambio radical: se construirá un muelle de dos posiciones, que posibilitará la operación con buques de tancaje. 

En la actualidad se pueden operar con barcos de 76.000 a 106.000 toneladas de porte.

Más capacidad

La intención es elevar esa capacidad. En primera instancia que estará lista en 2024, se podrá operar con buques de hasta 120.000 toneladas de porte, mientras un año más tarde, una vez que el proyecto esté concuido, se podrá empezar a cargar crudo un barcos de 160.000 toneladas, que es equivalente a un millón de barriles de crudo. Ese era uno de los principales pedidos de las petroleras que exportan crudo desde Vaca Muerta, que quieren cargar petróleo en embarcaciones de mayor tancaje para reducir costos de flete y logística.

Para ampliar la capacidad de la terminal de Oiltanking Ebytem es necesario dragar el canal que va desde la terminal de exportación hasta mar abierto, tarea que debe llevar adelante el consorcio del puerto de Bahía Blanca. 

Durante noviembre y lo que va de diciembre se trabajó en los detalles del proyecto con unas 15 compañías productoras y los lineamientos generales ya están consensuados. La primera etapa debería estar lista para 2024, lo que implica sumar dos tanques adicionales de 50.000 m3 cada uno y construir el muelle para ya comenzar a trabajar con barcos de 120.000 toneladas de porte. En la etapa final, la cual debería estar lista en 2025, ya deberían poder operar barcos de 160.000 toneladas de porte.

“Es un proyecto pensado centralmente para incrementar la exportación, pero sin descuidar el abastecimiento interno”, señalaron fuentes de la compañía. Desde Puerto Rosales también se abastece el mercado local al llevar crudo a Dock Sud, Ensenada y Campana.

Reparto de la capacidad adicional

Oiltanking Ebytem debe definir cómo asignará la la capacidad de almacenaje adicional entre los distintos productores. La idea es replicar o espejar el acuerdo al que llegaron las petroleras para repartir la capacidad incremental de Oldelval, aunque esa opción aún no está cerrado. En las últimas dos semanas del año, los cargadores deberán cerrar posición y presentar una oferta formal que especifique qué volumen están dispuestos a contratar. Luego, Oiltanking deberá oficializar la asignación a cada empresa. El proceso, según indicaron las fuentes consultadas, debería estar listo a más tardar a fines de la primera quincena de enero.

A su vez, la compañía ya lanzó la licitación para encarar las obras de construcción y ahora está en plena negociación de los detalles finales con los contratistas.

Financiamiento y concesión

La intención de la empresa es financiar el 50% de la inversión que demandará la obra con prepagos anticipados de los productores y la otra mitad con deuda que se colocaría en el primer cuatrimestre de 2023. Oiltanking ya está habilitada por la Comisión Nacional de Valores para emitir obligaciones negociables por 200 millones de dólares.

Para conseguir el financiamiento es clave que el gobierno les otorgue la extensión de la concesión. Oiltanking Ebytem fue constituida el 23 de diciembre de 1992 con el propósito de privatizar la carga, descarga y almacenamiento de hidrocarburos mediante la Estación de Bombeo y Terminal Marítima de Puerto Rosales. Ese mismo año, la firma Isaura S.A. resultó adjudicataria por concurso del 70% y al año siguiente el Ministerio de Economía aprobó a través de la resolución 139/93 el contrato de compraventa de acciones y la cesión de la concesión de transporte de hidrocarburos por un plazo de 35 años, contados desde el 6 de noviembre de 1992 prorrogables por 10 años más. Por ahora el vencimiento es en noviembre de 2027, pero podría pasar para 2037. La secretaría de Energía, Flavia Royón, aseguró el lunes en el Día del Petróleo que están trabajando para otorgar la extensión de la concesión y así facilitar el financiamiento de la obra.