La petrolera brasileña PetroRio anunció la compra de la participación de la británica BP Energy en Brasil en dos campos de producción de crudo ubicados en aguas muy profundas del país sudamericano por US$ 100 millones.
En un comunicado enviado al mercado, PetroRio informó de que se adjudicó las participaciones de un 35,7 % en el Bloque BM-C-30 (campo de Wahoo) y de un 60 % en el Bloque BM-C-32 (campo de Itaipu), ambos situados en la cuenca de Campos, por lo que se convertirá en la operadora de los dos campos del presal.
La transacción, que requiere ahora la aprobación de los reguladores, incluye además el pago de 40 millones de dólares del proceso de unitización del primer petróleo de Itaipu.
El presal es un horizonte de explotación en aguas muy profundas del océano Atlántico, por debajo de una capa de sal de dos kilómetros de espesor y cuyas gigantescas reservas pueden convertir a Brasil en uno de los mayores exportadores mundiales de petróleo.
Con la adquisición de Wahoo, la estrategia de PetroRio es formar un conglomerado de producción con el campo de Frade, que también se encuentra en la cuenca de Campos y fue adquirido por la petrolera el año pasado.
«PetroRio hace otro importante movimiento estratégico y consolida aún mas su modelo de negocios (ya consagrado en otros países) que incluyen la formación de clústers de producción», destacó la empresa en el comunicado.
El campo de Wahoo fue descubierto en 2008, tiene un potencial para producir más de 140 millones de barriles y está localizado a unos 30 kilómetros del campo de Frade.
La compañía calcula una productividad media inicial superior a los 10.000 barriles por día por pozo y una producción total que podría superar los 40.000 barriles por día en Wahoo, según estudios preliminares.
PetroRio proyecta gastar unos 800 millones de dólares (675 millones de euros) en el desarrollo del proyecto, cuya conexión con el campo de Frade debe incluir cuatro pozos productores y dos pozos inyectores, conectados a una isla de válvulas submarina para el desagüe del óleo producido.
La petrolera pretende realizar dicha inversión en asociación con los demás miembros del consorcio (la francesa Total y la indiana IBV), aunque todavía no ha decidido la fuente de financiación.