La decisión de Cristina Kirchner de colocar a Alberto Fernández al frente a la fórmula presidencial del kirchnerismo trastocó el escenario político, que desde el sábado permanece convulsionado. El ex jefe de Gabinete de Néstor Kirchner nunca estuvo a cargo en forma directa del manejo del área energética. Por el contrario, con Julio De Vido, hombre fuerte de esa área durante la mayor parte de los gobiernos kirchneristas, mantuvo una áspera contienda interna prácticamente desde los albores de ese espacio político en 2003.
Los mercados —entre ellos, el energético— esperan que con el paso de los días Alberto Fernández clarifique el armado del equipo económico que lo acompañará en caso de imponerse en las elecciones de octubre. Guillermo Nielsen, Matías Kulfas, Cecilia Todesca y Augusto Costa son algunos nombres que integran esa plantilla, según adelantó ayer Letra P.
EconoJournal recopiló algunas de las declaraciones de Fernández sobre energía realizadas entre 2003 y 2008, mientras estuvo al frente de la Jefatura de Gabinete primero de Néstor y después de Cristina Kirchner. Son fragmentos discursivos realizados hace más de 10 años en contextos totalmente diferentes al actual. Ofrecen, apenas, un encuadre histórico sobre distintas cuestiones vinculadas a la agenda energética de esos años.
Tarifas
“Es verdad –como decía algún diputado– que han pasado cuatro años, pero si la ley de emergencia económica cayera lo que inmediatamente ocurriría sería que los contratos volverían a su versión original; muchos de ellos tendrían tarifas dolarizadas y entonces a los únicos que les complicaríamos la vida sería a los argentinos, a la gente. Es verdad que nosotros nos hemos dado un mecanismo de discusión con los prestadores de servicios públicos que nos lleva a un debate lento y forzado, donde el único ganador es el argentino –y la Argentina–, que de este modo no se ve sometido al riesgo de tarifas dolarizadas o de un aumento de tarifas impensado que lo único que haga sea empobrecerlo. Es verdad que estamos pidiendo que se mantenga la emergencia, pero también es cierto –como decía el señor diputado Macaluse– que hemos mejorado mucho, aunque queda mucho por mejorar y necesitamos seguir contando con las herramientas para poder terminar de resolver aquello que haga falta”
(Alberto Fernández, presentación del Informe de Jefatura de Gabinete en la Cámara de Diputados, 29 de noviembre de 2007)
“Aspiro a que pronto la Argentina salga del purgatorio y rápidamente ingrese al cielo en un escenario de total normalidad donde no tengamos que andar discutiendo con las empresas los contratos leoninos que alguna vez se firmaron en la Argentina en favor de ellas. Todos deben entender que si estamos en un país donde vive el peso nadie tiene el derecho a dolarizar las tarifas, por ejemplo”
(Alberto Fernández, presentación del Informe de Jefatura de Gabinete en la Cámara de Diputados, 29 de noviembre de 2007)
Crisis energética
“He leído con enorme preocupación lo que dijeron muchos senadores sobre la situación energética. A esta altura de los acontecimientos uno no sabe muy bien cómo atender este tema, porque cada vez que uno viene, tiene que explicar y desmentir que nunca ocurre lo que todos se encargan de pronosticas. Creo que en ninguna oportunidad en que vine al Congreso de la Nación dejé de ser preguntado sobre la inminente crisis energética, que nunca llegó. Llevamos tres años. En días recientes hubo picos de consumo de energía eléctrica que el sistema soportó sin sobresaltos”
(Alberto Fernández, presentación del Informe de Jefatura de Gabinete en el Senado, 8 de noviembre de 2006)
Inversión en energía
“Nuestra mayor preocupación reside en que la energía no falte ante la magnitud del proceso de desarrollo que presenta la Argentina. Hemos ejecutado varias obras en materia energética, lo que ha garantizado el suministro de energía para que el país crezca. La Central Hidroeléctrica de Río Grande hoy proporciona 700 megavatios nuevos. Hemos mejorado el transporte del corredor Comahue-Buenos Aires y el de Rincón Santa María-Salto Grande, que nos trae energía de Yacyretá. En el primer caso, esto supone un incremento de 500 kilovatios, y en el segundo, de 250 megavatios nuevos. Seguimos desarrollando un programa de gestión energética –lo empezamos en 2004 y esperamos que la Argentina lo concluya en 2008– que supone la interconexión de Puerto Madryn con Pico Truncado. Esto nos va a permitir la conexión de 500 kilovatios más, que sería la interconexión entre el NEA y el NOA, la zona más desprotegida de la Argentina, lo que supone una inversión de 1.500 millones de pesos. También nos hemos decidido a buscar el desarrollo de la energía nuclear. En ese sentido hace pocos días hemos puesto en marcha el proyecto Atucha II, que va a posibilitar que aproximadamente en 2010 la Argentina cuente con 692 megavatios más. Esto demuestra que no somos desatentos a la mayor demanda energética. Es decir que no sólo estamos atentos sino que además nos ocupamos dando respuestas y buscando soluciones. En lo inmediato seguimos garantizándonos que la Argentina, con sus centrales termoeléctricas y su demanda de gas creciente, tenga el suministro necesario. Por eso es que la Argentina firmó el acuerdo gasífero con Bolivia, lo que nos permitirá incrementar en 20 millones más los 7,7 millones de metros cúbicos por día que recibimos hoy. O sea que en total podremos llegar a acceder a 27.700.000 metros cúbicos diarios de gas de Bolivia.
(Alberto Fernández, presentación del Informe de Jefatura de Gabinete en la Cámara de Diputados, 30 de agosto de 2006)
Retenciones a las exportaciones
«Con respecto al tema de las retenciones, tengo que decir al amigo Guillermo Alchouron que no le traigo ninguna buena noticia; cada vez que vengo me hace el mismo planteo, pero le tengo que seguir diciendo que en nuestra opinión las retenciones hoy en día son un excelente mecanismo redistributivo, porque permiten, precisamente, que aquellos que producen en pesos y exportan en dólares participen a los que tenemos que seguir viviendo, trabajando y cobrando en pesos. Por lo tanto, por el momento no tengo ninguna sorpresa para darle; no sé si alguna vez le podré dar esa sorpresa, porque me parece que hay una diferencia conceptual profunda entre lo que él entiende que son las retenciones y lo que nosotros entendemos al respecto.
(Alberto Fernández, presentación del Informe de Jefatura de Gabinete en la Cámara de Diputados, 18 de agosto de 2004)
Exportaciones de gas a Chile
“Escuché hablar de Chile, del corte inmenso que le hicimos a ese país. Estuve con el ministro del interior de Chile, con el ministro Insulza. El momento más grave que tuvimos con Chile significó la interrupción de 6 millones de metros cúbicos diarios. ¿Sabe de cuánto es, hoy, la disminución del gas que enviamos a Chile? De 900 mil metros cúbicos por día. Es decir que todo quedó reducido a la sexta parte del momento más grave. Y Chile –hay que hablar con los chilenos si no me quieren creer a mí –no tiene, en este momento, conflictos energéticos derivados de la falta de gas que la Argentina le suministra”
(Alberto Fernández, presentación del Informe de Jefatura de Gabinete en el Senado, 30 de junio de 2004)