El ministro de Producción de Santa Cruz, Leonardo Álvarez, analizó el escenario energético de la provincia y remarcó que el objetivo de la gestión está puesto en consolidarla como una de las principales generadoras de energía a nivel nacional. Subrayó como positivo que desde que asumió esta gestión provincial, Santa Cruz “no tiene cortes de producción, algo que era una constante”.

En diálogo con Econojournal, el funcionario fue tajante a la hora de dar su opinión sobre la política energética nacional: “No me gusta lo que se ha hecho”.

Explicó la actualidad del desarrollo de la producción de petróleo y gas en el sur de la provincia (Cuenca Austral) con los hidrocarburos no convencionales y, en el norte (Cuenca del Golfo de San Jorge) con la potencialidad de algunas áreas marginales. Y agregó que Santa Cruz está “apostando al off shore en aguas provinciales”.

También destacó la política de diálogo que tuvo la provincia con los sindicatos y las empresas petroleras.

Además, Álvarez —que podría integrar la fórmula del oficialismo en Santa Cruz junto con Alicia Kirchner— aseguró que en generación con energías renovables la provincia está cuantificando los vientos para proyectos eólicos y mareomotrices: “algo que no se hizo en Santa Cruz en 60 años”, comentó.

¿Cuáles son los principales pilares que explican la política energética actual de Santa Cruz?

Diría que el pilar fundamental fue el lograr que todos los sectores involucrados en la política energética se sientan parte y fueran partícipes de un cambio de paradigma para el sector a nivel local. Se trabaja de manera mancomunada con el objeto de que se desarrolle el sector energético en la provincia: trabajadores, empresas y gobierno provincial. Cuando decimos se desarrolle significa que se alineen intereses públicos y privados que aumente la producción, que se generen puestos de trabajos, que aumenten las cadenas de valor y desarrollo de proveedores locales y que se inserten cada vez más estudiantes santacruceños con formación técnica en tareas referidas al sector. Es un proceso largo y complejo pero que había que empezarlo. Actualmente creamos el primer “yacimiento escuela”, un trabajo realizado entre el Consejo Provincial de Educación, Fomicruz S.E y el IESC y además se lanzó un programa de capacitación para estudiantes de formación técnica en el yacimiento Varda Las Vegas, un trabajo del Consejo Provincial de Educación junto con el Ministerio de Producción y CGC.

En materia de hidrocarburos, la provincia ofrece dos realidades diversas: al norte, una región eminentemente petrolífera, se observó un descenso de la actividad en los últimos dos años. Al sur, en la cuenca Austral, en cambio, se registró un reverdecer de la actividad en gas. ¿Cómo se vinculan esas dos realidades?

Durante muchos años las dos cuencas productivas con las que cuenta la provincia estuvieron abandonadas. Nosotros logramos, desde diciembre de 2015, ponderarlas en valor. Hoy, la cuenca Austral tiene un desarrollo de no convencional muy interesante, y cuatro áreas exploratorias nuevas licitadas adquiridas por empresas de primera nivel. En el norte también se llamó a licitación y tenemos tres nuevas áreas licitadas. Esto es la demostración de cómo se va desarrollando y consolidando el sector en la provincia. Las realidades son diferentes pero la idea es una, que tiene que ver con instalar a Santa Cruz como una provincia central en la producción de hidrocarburos.

¿Qué decisiones tomó la provincia en los últimos tres años para impulsar el desarrollo de yacimientos en la cuenca Austral? ¿Cómo encauzó la relación con los sindicatos a fin de generar un entendimiento que potencia la inversión en la cuenca?

La provincia se planteó un camino no pensado para un periodo de gestión sino para 20 años vista en materia hidocarburífera y en el resto de las actividades económicas que nos convirtieron, por ejemplo, en la primera provincia productora de minería metalífera del país. La decisión de la gobernadora fue abordar el tema hidrocarburífero de manera integral no solo a través de la autoridad de aplicación, que es el Instituto de Energía, sino con participación del Ministerio de Trabajo para el diálogo sindical, el área ambiental del Ministerio de Salud, el Concejo Provincial de Educación, clave en la formación de futuros trabajadores, y por supuesto las distintas áreas de Producción, en especial para la coordinación con la cadena de valor de la actividad que conforman los proveedores.

La provincia trabaja desde diciembre de 2015 con el objetivo de aumentar la producción de hidrocarburos, con reglas claras, con el objetivo de preservar las fuentes del trabajo del sector en momentos donde la realidad económica del país no invita a la inversión y con la búsqueda permanente de poner un recurso de los santacruceños al servicio de ellos mismos.

¿Qué medidas tiene previsto tomar la provincia para intentar dinamizar la actividad en la cuenca del Golfo San Jorge?

Creo que esto tiene dos planos: por un lado hemos sido muy rigurosos en que se respeten los planes de inversión y los compromisos asumidos por las operadoras, hemos generado ámbitos de discusión y mesas de trabajo para resolver problemáticas del tipo laboral, proveedores locales, etc. Pero por otro lado, desde el inicio de la gestión hemos logrado licitar y adjudicar tres áreas exploratorias nuevas en donde se empiezan a realizar prospecciones con compromisos de inversión muy importantes. Además, estamos analizando la potencialidad de algunas áreas marginales. También estamos apostando al offshore en aguas provinciales. Indirectamente, se trabaja para mejorar la infraestructura vial, servicios, etc. No tenemos cortes de producción desde que asumimos, algo que en la provincia era una constante y en paralelo firmamos acuerdos laborales para la sostenibilidad del sector.

¿Existe potencial en el área de energías renovables? ¿Qué medidas se tomaron en el área?

En cuanto a la generación de energía con recursos renovables, como provincia hicimos lo que no se hizo en 60 años de historia: empezar a cuantificar el recurso eólico y mareomotriz. En el caso eólico estamos en una campaña de medición que termina a fin de año. Esto nos permitirá conocer más sobre el potencial eólico y poder empezar una etapa de proyecto y analizar las posibilidades de hacer otro parque. Conjuntamente, estamos analizando continuar con estas campañas de medición en otros puntos de la provincia. También se está avanzando con empresas rusas en acuerdos que nos permitan mensurar nuestra potencialidad mareomotriz, podemos decir que con todos estos argumentos (eólica, represas, hidrocarburos, mareomotriz y fotovoltaica), Santa Cruz es una tierra productora de energía por excelencia.

¿Qué balance realiza de la gestión del área energética que llevó adelante el gobierno nacional que encabeza el presidente Mauricio Macri?

No me gusta lo que se ha hecho. Diría que por dos motivos, uno conceptual/ideológico y el otro de gestión. El esquema tarifario de los servicios públicos es una muestra de ello, tarifas que no reflejan la realidad del sector, una enorme transferencia de recursos a los sectores regulados, baja de los incentivos el sector productor de gas y petróleo y además implementación errónea. Sinceramente creo que no hubo política energética. Fueron medidas aisladas, sin un programa claro para favorecer a un sector. Un ejemplo de esto es la falta de presupuesto para el yacimiento carbonífero de Río Turbio, que afecta directamente a dos comunidades que históricamente vivieron de esa explotación y la falta de terminación de la usina térmica que hubiera permitido la puesta en valor y la incorporación del carbón a la matriz energética nacional.

¿Qué inversiones recibió la provincia en el área de exploración y producción de hidrocarburos?

En este período hemos logrado compromisos de inversión solo en exploración por US$ 200 millones, si además consideramos el proyecto de CGC en el no convencional, tenemos que sumar US$ 1.435 millones más. Y además, se agrega la inversión que realizaron los operadores durante todo este tiempo en producción de hidrocarburos, tanto en la cuenca del Golfo San Jorge como en la Cuenca Austral. Si se compara con otras provincias y otras cuencas, estos valores son muy alentadores. Y si se lo compara con lo que venía sucediendo en la provincia en periodos anteriores esto es una clara muestra de un cambio considerable en la importancia que tiene para nuestra gestión este sector.

¿Cómo impacta en la provincia la construcción de las dos represas hidroeléctricas de Santa Cruz?

El impacto es muy grande, aumenta la demanda laboral, más trabajadores empleados con el impacto que tiene eso en las economías locales de las ciudades de Santa Cruz. Además consolidaría a Santa Cruz en una provincia generadora de energía a nivel nacional. Es una obra de una envergadura sin igual en la provincia y la obra energética más importante a nivel país. Además, se va a requerir una nueva línea de 500kv para poder transportar la energía que se genere. Y, finalmente, podemos decir que vamos a tener energía disponible en la provincia para el desarrollo de otros sectores como es la minería. Esperamos que el gobierno nacional finalmente le preste la atención necesaria, entienda la importancia y se acelere la etapa de construcción que ha sido demorada durante estos tres años.

El gobierno nacional lanzó una licitación para impulsar la exploración de áreas offshore en aguas profundas. En Santa Cruz, esa actividad está prohibida dentro de la plataforma continental que pertenece a la provincia por una medida judicial. ¿Cuál es la posición de la gobernación con relación al tema?

La provincia está convencida en la necesidad de que se desarrollen los sectores productivos, y en este sentido el offshore es clave, tanto en aguas nacionales como provinciales. Estamos dispuestos a ayudar al desarrollo del offshore en aguas nacionales. Contamos con más de 800 kilómetros de costa. Creemos que es importante para el país y para las provincias con costa el desarrollo de esta actividad. Pero además la Cámara de Diputados ha aprobado una ley que permite el desarrollo de la actividad offshore en aguas provinciales generando un nuevo horizonte para el sector y demostrando el interés de la provincia en este tipo de actividades, siempre en un todo de acuerdo con otras actividades económicas como la pesca y en armonía con el medio ambiente.