Varias distribuidoras eléctricas provinciales le advirtieron a la Compañía Administradora del Mercado Eléctrico Mayorista (Cammesa) que no podrán pagarle la energía que se les suministra y/o garantizar sus planes de inversión porque la suba de tarifas que están autorizando los respectivos reguladores provinciales no alcanza para cubrir todos sus costos. La lista incluye al menos a la empresa rionegrina Edersa, la estatal neuquina EPEM y la mendocina Edemsa. La Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica de la República Argentina (Adeera) le planteó al gobierno nacional el problema para que trate de encontrar una solución.
A raíz del pedido de Adeera, Cammesa contrató a la consultora Tecnolatina para que realice una auditoria en la rionegrina Edersa para ver si efectivamente la compañía no puede afrontar los gastos que demanda la concesión, tal como viene argumentando hace tiempo. Tecnolatina entregó el informe el lunes 8 de este mes y allí valida lo dicho por las autoridades de la empresa.
Si bien los detalles de la auditoría realizada en Río Negro aún no trascendieron, Tecnolatina expuso el pasado 5 de abril en la audiencia pública realizada en Mendoza para decidir la actualización tarifaria que se le va a otorgar a Edemsa a partir de mayo y allí también respaldó la posición de la distribuidora local. La empresa solicitó un aumento de 45% en el Valor Agregado de Distribución, pero el Ente Provincial Regulador Eléctrico (EPRE) recomendó que el ajuste para los clientes residenciales sea del 15%.
Tecnolatina remarcó que la metodología de adecuación tarifaria propuesta por el regulador provincial no acompaña la inflación. Por lo tanto, “la empresa se perjudica porque deberá pagar mayores penalidades por una calidad inferior y los usuarios porque verán aumentados los cortes de servicio, tanto en frecuencia como en duración”. En la audiencia, la consultora propuso que a raíz de la creciente inflación la actualización tarifaria, en lugar de ser cada seis meses, deba realizarse automáticamente, por ejemplo, “cuando los indicadores se desvíen en más de un 5%”.
Con un argumento similar al de Tecnolatina, Edemsa propuso en la audiencia que la actualización tarifaria no sea cada seis meses sino trimestral. La posición de la distribuidora se apoya en el hecho de que cuando se realiza el cálculo de costos, no se tiene en cuenta el momento en el que se va a aplicar la tarifa. «Por ejemplo, la última revisión tarifaria se aplicó recién 8 meses después de realizados los estudios, con el perjuicio que ello implica en el marco de un contexto inflacionario», aseguraron desde empresa provincial.
A su vez, en Neuquén la estatal EPEN advirtió que mantiene una deuda con Cammesa porque tres cooperativas prestadoras que le adquieren energía presentan a su vez una deuda con EPEN. “Estas cooperativas aducen retrasos en las actualizaciones tarifarias por parte de sus poderes concedentes, falta de pago de suministros de organismos oficiales, entre otros argumentos”, afirmó EPEN en una carta que envió a Adeera el 5 de abril advirtiendo la situación. En ese caso, Cammesa también está evaluando la realización de un análisis técnico de cada cooperativa.
En caso de que se detecte, como pasó con la rionegrina Edersa, que tienen insuficiencia de recursos, la intención del gobierno nacional es ir contra el poder concedente para que se haga cargo de la situación, dado que es el garante del cumplimento de los prestatarios. Es decir son las gobernaciones las que deberán dar una respuesta a la situación, ya sea revirtiendo concesiones, estatizando o dando subsidios si es que no autorizan los aumentos de tarifas de las distribuidoras en línea con la inflación.