Atucha I debería dejar de operar el próximo 29 de septiembre para iniciar las obras de extensión de vida útil de la central nuclear, que se extenderían por dos años. Sin embargo, preocupado por la falta de generación para cubrir el pico de demanda eléctrico previsto para los meses de calor, el área energética del gobierno está evaluando la posibilidad junto con Nucleoeléctrica Argentina (NASA) y Cammesa de postergar la salida de operaciones de la planta atómica hasta después del verano.