El gasoducto Néstor Kirchner transporta 11 millones de m3 de gas por día, pero podría estar transportando 22 millones si el gobierno no le hubiera retaceado el giro de fondos a las constructoras a cargo de las obras. El gobierno nacional mantiene una deuda de 40 millones con las constructoras Sacde y Contreras lo que impidió terminar las plantas para este invierno. Ahora, en cambio, debe importar combustibles líquidos de urgencia por 500 millones para afrontar el faltante de gas.