Pese a la resistencia que provoca dentro del propio gobierno, el ministro de Economía, Martín Guzmán, reitero que este año los subsidios energéticos se mantendrán estables con relación al Producto Interno Bruto. Para que ello ocurra las tarifas deberían acompañar a la inflación, estimada en torno al 30% para este año. Sin embargo, desde los entes reguladores vienen diciendo que los aumentos oscilarán entre 7% y 9%. Lo que dijo Guzmán ahora es que ese sería solo el primer aumento y hacia fin de año habría otro ajuste a partir de la puesta en marcha de una segmentación tarifaria.
“Este tema de los subsidios es un tema importante, porque si aumentan los subsidios en relación al producto significa que estamos destinando más recursos a algo que no es gasto de alta calidad. Necesitamos destinar más recursos a la ciencia, a la innovación en el desarrollo, a la educación, a la salud pública, a la infraestructura pública. Y estamos trabajando para eso”, aseguró Guzmán.
El subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo, tomó distancia públicamente con respecto a esta postura al afirmar hace algunos días que “nuestra hoja de ruta además del presupuesto es nuestra plataforma electoral”.
-¿En qué sentido? –le preguntaron en Radio Con Vos.
-Uno de los puntos más importantes de nuestra plataforma electoral estuvo vinculado con la política tarifaria del gobierno anterior y con la necesidad de reformular esa política tarifaria. Hoy estamos asistiendo a una renegociación tarifaria que nos va a permitir dejar atrás la RTI del macrismo e iniciar un camino de una política tarifaria que tenga foco en la recuperación del poder adquisitivo y de la actividad económica. –respondió Basualdo.
La semana pasada Basualdo fue más allá y aseguró en C5N que “el aumento de tarifas, si es que hay, va a acompañar la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores y de la actividad económica en general”. Cuando le pidieron un porcentaje de aumento estimado dijo que “entre 7 y 9 por ciento resulta algo razonable”. Un porcentaje similar autorizaría el Enargas que conduce el interventor Federico Bernal.
A Guzmán le preguntaron este sábado en CNN en Español por estas declaraciones de subordinados suyos que contradicen los planes de Economía y los planes de los entes reguladores que autorizarían subas por debajo de lo que desea Economía. Lo primero que aclaró el ministro es que los entes reguladores no están bajo su órbita. “Los entes no dependen del ministerio de Economía, dependen directamente del presidente, pero se trabaja de una forma coordinada”, sostuvo sin hacer ninguna referencia a Basualdo, quien en teoría sí es un subordinado suyo.
Luego insistió con que la suba tarifaria acompañará la inflación, pero en dos etapas. “Los aumentos de los que estamos hablando son aumentos que tienen que ver con mantener ciertos equilibrios y salir del esquema que adoptó Juntos por el Cambio, que implicaría aumentos de arriba de 100 por ciento de las tarifas para todo el mundo. Nada así se va a hacer. Posiblemente se parta en dos: un aumento general y después, en el marco de una ley de emergencia tarifaria que el presidente anunció en la Asamblea Legislativa, haya aumentos o quita de subsidios para quien lo necesita y se mantenga el subsidio −o incluso se agrande− para quien lo necesita, que es la tarifa social”, remarcó el ministro.
Guzmán agregó después que “es posible que la parte que es igual para todo el mundo sea de dos dígitos y se reparta en dos partes. Y que, como digo, a lo largo del año cuando vayamos identificando a quien no necesita el subsidio o que no es quien más lo necesita, esos reciban un aumento más alto y eso implique que se pueda cumplir con la meta del presupuesto y que por lo tanto el Estado cuente con los recursos para poder invertir en la educación y en todo lo demás”.
Por último, el ministro insistió con que el objetivo sigue siendo que los subsidios energéticos no superen este año el 1,7 por ciento del Producto Bruto. “Esa es la meta establecida en el presupuesto y eso es para lo que se está trabajando. Insisto, esto sí que es muy importante: lo que estamos haciendo es ordenar esta cuestión del cuadro tarifario, estaba muy desordenada. Si no hacíamos nada e íbamos con el esquema del gobierno anterior, eso le hubiera hecho mucho daño a la gente. Si se congelasen las tarifas, eso también le haría mucho daño a la Argentina. Hay que tener un equilibrio y en eso estamos trabajando”, concluyó.