CGC, la petrolera del grupo Corporación América, que es presidida por Hugo Eurnekian, negocia la compra de los activos de la petrolera china Sinopec en Santa Cruz, según confirmaron fuentes del sector privado a EconoJournal. Las conversaciones entre las partes están muy avanzadas, aunque todavía resta el closing de la operación, que no será sencillo. Las fuentes consultadas evitaron hacer referencia al precio al que podría cerrarse la operación.
Ante la consulta de este medio, desde CGC evitaron hacer comentarios.
Sinopec es la quinta productora de crudo del país, pero en los últimos años registra un notorio retroceso en materia de inversiones en la provincia. De acuerdo con la declaración que presentó ante la Secretaría de Energía, el año pasado invirtió US$ 32 millones en sus campos santacruceños. En cambio, en 2017, sus desembolsos fueron de US$ 108 millones.
La caída de las inversiones redundó en un derrumbe de la producción. En diciembre de 2016 producía 4.187 metros cúbicos diarios de crudo y en el mismo mes de 2020, anotó una producción de 2.321 metros cúbicos diarios, lo que representa un descenso del 40 por ciento.
De salida
A raíz de esta situación, Sinopec enfrentó recurrentes situaciones de tensión con la administración provincial y con el sindicato de trabajadores petroleros privados, que lidera Claudio Vidal. Ambos sectores vienen exigiendo un mayor nivel de actividad en las áreas.
Por estas razones, desde la gobernación que encabeza Alicia Kichner ven con buenos ojos que CGC pueda pasar a operar esos campos. La petrolera de Corporación América llevó adelante un importante desarrollo de gas en la Cuenca Austral, en el sur de Santa Cruz. Allí comenzó a operar en 2018 y en la actualidad produce casi 5 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/día), el doble que en 2013.
Recientemente, la compañía anunció que en el marco del Plan Gas invertirá U$S 450 millones durante los próximos cuatro años.
Obstáculo
El principal obstáculo para cerrar la operación es el precio que pagó Sinopec en diciembre de 2010 por los activos que hoy tiene a la venta. Desembolsó un total de US$ 2450 millones para quedarse con áreas de la norteamericana OXY en Santa Cruz, Chubut y Mendoza.
De ese paquete, las concesiones santacruceñas son las que generan mayor interés en la industria hidrocarburífera. Son bloques cuya concesión expiran a mediados de la década y no serán prorrogados por la provincia, por lo que su precio de mercado está muy lejos del que pagó Sinopec hace poco más de 10 años.
La petrolera china deberá asumir un importante pérdida en el valor de los activos para cerrar la operación con CGC. Ese fue el obstáculo que impidió otras negociaciones en el pasado con YPF y Vista Oil&Gas, entre otras empresas que mostraron interés. Esta vez, sin embargo, la petrolera que preside Hugo Eurnekian tiene mayores chances de concretar la transacción.