Camet e Hidenesa
Subdistribuidoras de gas abandonan el negocio o reducen su participación por el congelamiento tarifario
18 de noviembre
2020
18 noviembre 2020
El congelamiento tarifaria, vigente desde abril de 2019 puso contra las cuerdas a estos operadores que han visto incrementar sus costos mientras sus ingresos permanecen fijos. Dejaron de pagar el gas y ahora se achican.
Escuchar nota

Jaqueadas por el congelamiento tarifario, las subdistribuidoras gasíferas atraviesan una profunda crisis y algunas han decidido reducir su participación en el negocio o directamente retirarse transfiriéndoles la obligación de prestar al servicio a las distribuidoras, que operan como proveedoras de última instancia. Las que están transitando ese camino son la operadora marplatense CAMET y la estatal Hidrocarburos del Neuquén (Hidenesa). En ambos casos es Camuzzi quien deberá continuar con la prestación del servicio.

La figura del subdistribuidor está contemplada en el decreto 1738/92 y en las Reglas Básicas de la Licencia de Distribución aprobada por el decreto 2255/92. Se lo define como un cliente autorizado por la Autoridad Regulatoria para operar cañerías de gas que conectan el Sistema de Distribución de la distribuidora con un grupo de usuarios.  Tiene con esos usuarios las mismas obligaciones que rigen para las distribuidoras, pero no es considerado como proveedor de última instancia.

Su tarea ha sido y es esencial en aquellas áreas geográficas en donde las distribuidoras declinan su derecho de prioridad, tanto para la construcción del emprendimiento como de su operación y mantenimiento. En la actualidad, hay 65 subdistribuidoras autorizadas por el Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), entre las cuales figuran cooperativas, empresas privadas e incluso operadores estatales como Hidenesa, Bagsa y Distrigas. Brindan el servicio en 225 localidades.

Una modificación regulatoria que introdujo el ente en 2017 erosionó su margen de operación, ya que algunas subdistribuidoras pagan el gas más caro de lo que lo abona un cliente R1 a la distribuidora. A su vez, el congelamiento tarifaria, vigente desde abril de 2019, constituyó el golpe de gracia para estos operadores que han visto incrementar sus costos mientras sus ingresos permanecen fijos. El principal problema lo enfrentan las firmas más pequeñas que no pueden compensar los menores ingresos a partir de la escala del negocio.

La primera reacción fue dejar de pagar el gas. De hecho, la mayoría de las subdistribuidoras tienen deudas por no abonar el fluido. Sin embargo, ahora algunas compañías directamente tomaron la decisión de reducir su negocio o directamente dejar de prestarlo. En el sector afirman que en el Enargas funciona una comisión que se ocupa del tema, pero en todos estos meses de gestión no le aportó ninguna solución a los operadores.

Los casos de Camet e Hidenesa

Camet es una cooperativa que no solo brinda servicio de gas sino también de electricidad, telefonía e internet. Lo que decidió la firma es desentenderse de la provisión de gas. Por lo tanto, unos 200 usuarios pasarán a ser abastecidos directamente por Camuzzi.

Son los barrios El Tejado, La Laura, Castagnino, Las Margaritas, Santa Angela, 2 de abril y el Sosiego. Muchos de ellos están entre el aeropuerto y la entrada a Mar del Plata, sobre la ruta 2. Para los vecinos el único cambio es que pasaran a recibir la factura de Camuzzi y pasarán a ser atendidos por las vías de comunicación que ofrece esta compañía, pero la red la red y el medidor seguirán siendo los mismos. Además, no habrá cambios en las tarifas.

El caso de Hidenesa es diferente. La compañía controlada por el gobierno de Neuquén presta servicio en unas 30 localidades y cuenta con unos 20 mil usuarios en la provincia. La decisión que le comunicó a Camuzzi y al ente regulador es que dejará de proveer gas solo en 4 localidades pequeñas que tienen entre 90 y 200 medidores cada una. Son Santo Tomás, Villa El Chocón, Las Buitreras y Los Catutos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

| 11/12/2024
Según los requerimientos de ingresos bajo el paraguas de la RQT 2025-2029 que Edenor y Edesur venían negociando con la gestión de Rodríguez Chirillo, el Valor Agregado de Distribución de las empresas eléctricas tendría que aumentar cerca de un 60% en enero de 2025, lo que tendría un impacto en la factura final que pagan los hogares del AMBA del orden del 30%. Economía descartó autorizar incrementos de esa envergadura. El objetivo es moderar la pauta tarifaria para alinearla con el programa inflacionario de 2025. Las compañías gasíferas podrían negociar un menor salto tarifario a cambio de extender por 20 años sus licencias de transporte y distribución.
| 10/30/2024
Formalmente la intervención la hará el Inaes, que es la autoridad de aplicación de la Ley de Cooperativas, mientras que Cammesa aportará la gestión en cada institución. Son cinco distribuidoras bonaerenses, una de Entre Ríos y otra de Tierra del Fuego. El gobierno prepara más intervenciones porque el cálculo que hacen es que el sector de cooperativas eléctricas acumula una deuda de alrededor de 325.000 millones de pesos.
| 10/02/2024
El secretario Coordinador de Energía y Minería analizó el Plan de Contingencia y Previsión que el gobierno publicó este miércoles en el Boletín Oficial. “La reducción voluntaria de carga para grandes usuarios es una medida de mercado», ejemplificó. También dio detalles sobre la política tarifaria, el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones y el escenario que se abre para las energías renovables.
| 09/30/2024
El Estado tiene la obligación de cobrar el precio del gas promedio de mercado.  Si el gobierno no tomaba la decisión de bajar el precio, se iba a continuar con el valor promedio actual de US$ 3,46 por/MMBTU y a los usuarios se les iba a seguir facturando con el valor del invierno durante los meses de verano. Por lo cual se corría el riesgo de que se presente una acción judicial pidiendo la suspensión de los cuadros tarifarios.
WordPress Lightbox

TE RECOMENDAMOS