«En un video que circuló mucho por Internet, aparecen vecinos de la ciudad italiana de Siena cantando juntos por la noche desde sus ventanas para darse ánimos mutuamente. En tiempos oscuros, nuestra parte más humana resplandece más que nunca». Con estas palabras cerró su conferencia Mario Mehren, el CEO global de la firma alemana Wintershall Dea, ofrecida por streaming debido a la expansión del COVID-19. El ejecutivo mostró números positivos luego de la fusión entre las dos empresas alemanas que se concretó en mayo del año pasado. Pero también describió un escenario de alta incertidumbre para 2020 provocado por los efectos del coronavirus y la abrupta caída del precio del barril de petróle

La primera idea que compartió Mehren en la conferencia de prensa anual que se transmitió el 18 de marzo desde la ciudad de Kassel, ubicada en el centro de Alemania, fue que «en estos tiempos que vivimos todo es incierto. Nada sucede como se había planeado. Esta es la esencia de la crisis del coronavirus. Estamos obligados a cambiar nuestra forma de pensar, a adaptarnos a las circunstancias y a evolucionar». Y agregó: «Nuestro sector vive una era de profunda transformación en la que, más que nunca, es necesario pensar y actuar de manera distinta. Son tiempos complejos».

A mediados de marzo, Wintershall Dea, que es el quinto productor de gas de la Argentina, ya había implementado el teletrabajo y distintos planes de emergencia a nivel global para garantizar la seguridad y continuidad de todas las operaciones y no interrumpir la producción y el suministro de energía.

El ejecutivo señaló la particular situación del sector petrolero, que está atravesado por una caída abrupta del precio del petróleo. «Los dos primeros meses de este año ya introdujeron grandes dosis
de incertidumbre en la economía mundial. Y el coronavirus ha venido a reforzar esta inestabilidad. La repentina caída de los precios del petróleo no hace sino agravar la situación. Hacía 30 años que no se veía una caída de esta magnitud»,  añadió Mehren. 

Además, opinó sobre el conflicto de los países petroleros de la OPEP ampliada: «Esta guerra de precios iniciada por Arabia Saudita afectará a toda la economía mundial, aunque naturalmente los primeros damnificados serán las empresas productoras de petróleo y gas; es decir, nosotros». De todos modos, aclaró que «Wintershall Dea
es una empresa fuerte, sólida. Incluso en tiempos de crisis como los actuales. La fusión se produjo en el momento oportuno». Mehren hizo referencia a la reciente fusión entre Wintershall y Deutsche Erdoel AG (DEA), dos empresas alemanas con una larga tradición a sus espaldas que en mayo del año pasado decidieron fusionarse y formar una sola compañía. Así se convirtió en la mayor productora independiente de gas y petróleo de Europa. «Somos líderes en producción y reservas, y somos líderes en costos de producción, mucho más bajos que los de nuestros competidores. Esto, por el momento, nos protege de la tormenta. Y nos permite navegar con rumbo firme a través de ella», remarcó el CEO. Hoy la cartera de la empresa alemana está compuesta en un 70% por gas y en un 30% por petróleo. 

Wintershall Dea pisa fuerte en el segmento de exploración y producción, ya que tiene presencia en cuatro regiones: Norte de Europa, Rusia, Latinoamérica y África del Norte y Medio Oriente. A esto hay que sumar flujos de caja estables procedentes del segmento de midstream con Nord Stream 1, el enorme gasoducto subacuático ruso-alemán de 1.224 km con capacidad para transportar 55.000 millones de metros cúbicos diarios de gas natural proveniente de Rusia y dirigidos hacia toda Europa, donde la compañía tiene una importante participación. 

En la conferencia, Mehren contó que «el primer tramo del gasoducto de conexión europeo EUGAL (que une el norte de Alemania con la República Checa) ya está plenamente operativo. Se trata de uno de los proyectos de infraestructura energética más grandes de la Unión Europea, y en él participa tanto capital privado como público. Todo ello, dentro de plazo y presupuesto».

Producción y finanzas

Wintershall Dea produce gas y petróleo «desde Siberia hasta Tierra del Fuego, y en 2019 hemos batido récords. La producción media diaria de la empresa alcanzó los 642.000 barriles», remarcó Mehren. Cuenta con reservas probables de hidrocarburos de 3.800 millones de barriles de petróleo equivalente (BOE). Con el ritmo de producción actual, el alcance de sus reservas es de 17 años. «Se trata, sin duda, de un dato extraordinariamente positivo que nos da la confianza necesaria para hacer frente a los desafíos actuales y futuros. Nuestro objetivo, sin embargo, no es batir nuevos récords de producción cada año. Porque lo que buscamos no es la cantidad, sino la calidad», aclaró el CEO en la conferencia de prensa. 

«Esto es hoy más importante que nunca. Es imprescindible que nuestra cartera sea resiliente para poder reaccionar a las oscilaciones del mercado y la volatilidad de los precios. Como es el caso en estos momentos. La clave de todo está, principalmente, en que nuestro trabajo sea eficiente en términos de costos», explicó Mehren, y añadió que «no en todas partes los costos de producción son tan bajos como en Rusia o la Argentina. Operar en algunos países resulta más caro. Pero contamos con un excelente mix».

En 2019, los costos medios de producción de Wintershall Dea fueron de u$s 4,30 por BOE, es decir, casi un 50% menos que los u$s 8 de media que registró aproximadamente el sector, según describió el ejecutivo. Por otra parte, las sinergias generadas por la fusión ya dejan notar sus efectos. «Estamos avanzando en la dirección correcta para alcanzar los 200 millones de euros de sinergias de tesorería previstas para 2022. Esto demuestra que la integración de ambas empresas avanza con paso firme», subrayó.

El año pasado el resultado antes de intereses, impuestos, depreciación, amortización y gastos de exploración –lo que se conoce como EBITDAX– se situó en los 2.830 millones de euros (cerca de u$s 2.590 millones). Mehren comentó también que en junio de 2019 la compañía obtuvo la calificación investment grade por parte de las calificadoras de riesgo Moody’s y Fitch. La primera colocación de acciones lanzada en septiembre del año pasado por la petrolera alemana fue de 4.000 millones de euros (u$s 3.660 millones) y tuvo un «buen recibimiento». Wintershall Dea tiene previsto cotizar en Bolsa. Para mediados de año realizará una OVP (Oferta Pública de Ventas), aunque el CEO aclaró que «la salida a la Bolsa dependerá de las condiciones del mercado».

Perspectivas para 2020

Mario Mehren indicó que «los efectos negativos del coronavirus tendrán un impacto global significativo, especialmente durante el primer y segundo trimestre de 2020. Los precios del gas y del petróleo se situarán muy por debajo de los de 2019. Está previsto que en 2020 la producción de Wintershall Dea alcance entre 600.000 y 630.000 barriles equivalentes de petróleo diarios, excluyendo los volúmenes procedentes de Libia. Esto nos sitúa en los volúmenes de 2019».

Por la incertidumbre que hay en el mundo sobre lo que sucederá en todo el año, la petrolera está adoptando una serie de medidas: en primer lugar, reducirá un 20% las inversiones en desarrollo con respecto a 2019. Esto significa que se situarán entre 1.200 y 1.500 millones de euros (entre u$s 1.000 y 11.370 millones). En segundo lugar, reducirá el presupuesto de exploración a un rango que va de 150 a 250 millones de euros como máximo (entre u$s 140 millones y u$s 230 millones). En 2019 la compañía destinó 340 millones de euros (u$s 310 millones). Sobre esto, Mehren señaló: «No hay duda de que 2020 será un año extremadamente complejo para todo el sector. Pero estamos convencidos de que nuestro sólido balance, nuestra eficiencia de costos en términos de producción y la determinación que estamos teniendo nos permitirán capear con éxito el temporal. Y alcanzar la otra orilla más eficientes y más fuertes que antes de la crisis». 

Innovación

La apuesta por la digitalización

El CEO de Wintershall Dea explicó la importancia en el presente que tiene el proceso de digitalización que está llevando adelante la compañía. «Nos permite reducir nuestros costos de explotación hasta un 20%. Nos ayuda a proteger mejor a las personas y al medio ambiente, y contribuye con la protección del clima», resaltó Merhen, que puso como ejemplo de tecnología innovadora a Digital Twin, de la plataforma Mittelplate, «que nos permite duplicar digitalmente y optimizar todos nuestros procesos, lo cual supone un ahorro anual de 1 millón de euros. En estos momentos también estamos creando el Gemelo Digital de nuestro campo de Brage. Y pronto Juschno-Russkoje tendrá otro. Estos proyectos de innovación convierten a Wintershall Dea en un socio de gran reputación y demanda en todo el mundo».