En el marco de la actual emergencia sanitaria, las empresas distribuidoras de gas natural por redes están experimentando una muy importante caída en su recaudación y no obstante ello, siguen prestando en condiciones de seguridad y confiabilidad, un servicio público esencial para sus casi 9 millones de clientes en todo el país.
Las empresas cuentan con los recursos que surgen de las facturas mensuales de gas que sostienen no sólo el pago de salarios, los costos de operación y mantenimiento, la realización de inversiones en seguridad sino que también aportan los recursos para toda la cadena de valor del sector (incluyendo productoras y transportistas) y para el Estado nacional, provincial y municipal, puesto que una parte de las facturas corresponde a impuestos que son especialmente necesarios en este contexto de pandemia.
Con el fin de proteger a los sectores más vulnerables, el Poder Ejecutivo Nacional dictó el Decreto 311/2020 que prohíbe efectuar cortes por mora o falta de pago a ciertos sectores vulnerables de la población (se adjunta listado).
Es necesario recordar que esta prohibición no tiene carácter universal y que sigue siendo relevante que todos los sectores de la población que están en condiciones de hacerlo, paguen puntualmente las facturas de gas.
Para hacerlo cumpliendo las normas de aislamiento y distanciamiento social, todas las empresas que forman ADIGAS han dispuesto e informado la posibilidad de pagar las facturas por medios electrónicos no presenciales, de modo que el quedarse en casa no sea impedimento para cumplir los compromisos con empresas que sirven a todos los argentinos.
En este sentido, hacemos propias las definiciones de las autoridades y consideramos que pagar las facturas de gas es una expresión de solidaridad social respecto de aquellos que, en esta situación de emergencia, no pueden hacerlo.