Vista, el segundo operador de petróleo no convencional de la Argentina, dio un paso clave en su plan para descarbonizar sus operaciones al electrificar el primer equipo de perforación de Vaca Muerta alimentado íntegramente con energía renovable.
Se trata del equipo Nabors F-24, actualmente en operación en el bloque Bajada del Palo Oeste, el cual marca un paso significativo hacia prácticas más sostenibles en la industria. Junto con ello, Vista ha activado la primera electro-compresora de Sudamérica abastecida exclusivamente de energía eléctrica proveniente de fuentes renovables.
Este logro se ha llevado a cabo como parte de un proyecto integral que incluyó la conexión de Vista al Sistema Argentino de Interconexión (SADI), desde la Estación Transformadora Loma Campana (ETLC) del EPEN, en Neuquén. El proyecto abarcó múltiples aspectos, desde la ampliación de la ETLC hasta la construcción de una nueva subestación para alimentar la electro-compresora, así como el tendido de más de 30 km de línea de media tensión.
Es importante destacar que Vista viabiliza el abastecimiento a sus instalaciones en Vaca Muerta con energía renovable gracias a un acuerdo estratégico con la empresa Genneia.
Reducir la intensidad de las emisiones
Este avance forma parte de la ambición de Vista de convertirse en un operador net zero para 2026, mediante la implementación de un plan integral que apunta a reducir la intensidad de sus emisiones de gases de efecto invernadero a 7 kg de CO2 equivalente por barril de petróleo en el mismo año. Entre 2020 y 2023, la empresa ya ha logrado reducir un 26% sus emisiones en términos absolutos y un 60% en intensidad, medida por unidad de hidrocarburo producida.
Según precisaron desde la compañía, estos logros de Vista no solo son significativos para la empresa en sí, sino que también consolidan a Vaca Muerta como una formación low cost y low carbon, cuya capacidad para proveer al mundo de energía confiable, asequible y sustentable queda demostrada.