Venezuela firmó el otorgamiento de la licencia para el desarrollo del campo Dragón, un proyecto para producir y exportar gas offshore a Trinidad y Tobago que recibió el visto bueno de Estados Unidos. La venta de gas a Trinidad y Tobago podría ayudar a reanimar sus exportaciones de gas natural licuado. El país caribeño está utilizando en la actualidad solo un tercio de su capacidad de licuefacción total, la segunda mayor en el continente luego de EE.UU.
El ministro de Petróleo y Presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Pedro Rafael Tellechea, y el ministro de Energía e Industrias Energéticas de Trinidad y Tobago, Stuart Young firmaron la licencia que permitirá a la estatal National Gas Company (NGC) de Trinidad y Tobago y a Shell explorar, producir y exportar gas desde campo Dragón, localizado en la frontera marítima entre los dos países.
La licencia otorgada por Venezuela es por 30 años y prevé una producción inicial de 185 millones de pies cúbicos por día de gas, informó PDVSA. Funcionarios de Trinidad y Tobago estimaron que Dragón podría lograr su primera producción de gas en los próximos dos años si se toma una decisión final de inversión. Los recursos estimados en Dragón ascienden a 4,2 tcf.
El ministro Young señaló que Dragón y Manatee, otro proyecto de gas pero en aguas de Trinidad, podrían aportar hasta 1 billón de pies cúbicos de gas en su primera fase.
Capacidad ociosa en Trinidad
Trinidad y Tobago le asigna a Dragón una importancia central para reanimar sus exportaciones de LNG lo más rápido posible. El desplome de la producción nacional de gas dejó al país con cerca de dos tercios de su capacidad de licuefacción fuera de servicio.
Las exportaciones de gas licuado de Trinidad contabilizadas por S&P Global Commodity Insights entre enero y septiembre de 2023 ascendían a 6,5 millones de toneladas. Representa algo más de un tercio de la capacidad total de licuefacción existente en las instalaciones de Atlantic LNG. La compañía posee cuatro trenes de licuefacción con una capacidad total de 15,8 millones de toneladas anuales.
Atlantic LNG es una compañía conformada por NGC, Shell y BP. La producción de LNG en Atlantic representó el 15% de la producción global de Shell y el 18% de la producción global de BP en 2022.
En lo que respecta a Dragón, Shell sería el operador del proyecto y del futuro gasoducto de 18 kilómetros que permitirá importar el gas desde Venezuela. Shell también podría tomar una decisión final de inversión en Manatee, un campo de gas offshore en la costa este de Trinidad. Manatee es parte del descubrimiento Loran-Manatee compartido con Venezuela. Las reservas probadas ascienden a 10 tcf, unos 7,3 tcf en Loran (del lado venezolano) y 2,7 tcf en Manatee.
Acuerdo con EE.UU.
El desarrollo de Dragón será posible gracias al levantamiento de las sanciones de Estados Unidos sobre el petróleo y gas venezolanos. El gobierno de Joe Biden autorizó una flexibilización de las sanciones luego de un acuerdo entre el oficialismo y la oposición en Venezuela para la celebración de elecciones presidenciales este año. El acuerdo tuvo un hito importante a fines de noviembre con la aprobación del marco que permitirá el restablecimiento de la candidatura de María Corina Machado, la dirigente opositora que mejor mide en las encuestas.
La Oficina de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos emitió en octubre una modificación solicitada por Trinidad y Tobago en la licencia de desarrollo y producción del campo Dragón.
La enmienda habilitó el pago en dólares o en especie a Venezuela por cualquier gas suministrado por PDVSA. También permitió a Shell negociar con NGC los términos de la exportación del gas a Trinidad.