Las diferencias por los beneficios del megaproyecto de cobre Josemaría entre las provincias de San Juan y La Rioja, ambas gobernadas por el Frente de Todos, se agudizaron en los últimos días. El gobernador riojano, Ricardo Quintela, quiere recibir al menos una parte de lo que podría dejar este megadesarrollo minero que está ubicado en territorio sanjuanino y que demandará una inversión de 3.100 millones de dólares en la construcción, que iniciará en 2022. Por su parte, el gobernador sanjuanino Sergio Uñac descarta -por ahora- compartir las regalías por el cobre y oro que exportará Josemaría en unos años. La disputa también es por el canon minero, los 4.000 puestos de trabajo y sobre quién aportará los proveedores de servicios que necesitará Josemaría en las instalaciones a 4.300 metros sobre el nivel del mar.
El megaproyecto Josemaría está ubicado en San Juan, pero a poco más de 700 metros del límite con La Rioja, y podría exportar cobre a partir de 2024 más de 1.150 millones de dólares anuales. Según los informes técnicos presentados por Josemaría Resources, subsidiaria del grupo canadiense Lundin, a cargo del megaproyecto, las regalías sumarán más de 25 millones de dólares anuales.
Fuentes cercanas al gobernador Uñac consultadas por EconoJournal entienden que San Juan no puede ceder al reclamo de Quintela porque el proyecto, que tendrá una vida útil de -al menos- 19 años, está en San Juan y los beneficios deberían quedar para esa provincia, que además ya le dio visto bueno a la licencia social.
Reclamo de La Rioja
Por su parte, allegados a la gobernación de La Rioja indicaron a EconoJournal que Ricardo Quintela reclama que el impacto ambiental será de igual magnitud para ambas provincias y abarcará 70 kilómetros hacia San Juan y otros 70 kilómetros hacia La Rioja. Otro punto que pone sobre la mesa Quintela es que para acceder a la zona de Josemaría hay que pasar por caminos riojanos porque desde San Juan por ahora no se puede acceder.
La Rioja también discute el impacto hídrico del proyecto, ya que-entiende- el agua con la que se abastecerá Josemaría parte de la cuenca que viene del norte, en la provincia de La Rioja. Según la empresa canadiense Lundin, el proyecto utilizará agua subterránea confinada en pequeños acuíferos y no demandará agua del Río Blanco.
Además, desde la gobernación de Quintela plantean que, así como está diseñado, no tendrá impacto social en La Rioja. La puja en este punto es por quién se queda con los 4.000 puestos de trabajo que demandará la construcción del proyecto y los 1.000 puestos en la etapa de producción. Otro tema que genera cortocircuito entre ambas provincias es quién aporta las empresas para la cadena de proveedores de servicios que tendrá Josemaría.
Apoyo desde la Casa Rosada
El presidente Alberto Fernández visitó esta semana la provincia de San Juan. Allí declaró que «la Constitución dice que las provincias son dueñas de sus recursos naturales y éste (proyecto minero Josemaría) es uno que está en San Juan. No hay más que hablar«. Las declaraciones fueron al Diario de Cuyo. En San Juan recibieron estos dichos del presidente como un fuerte respaldo a San Juan en la disputa con La Rioja. De todos modos, desde ámbitos nacionales promueven el diálogo entre ambas provincias para llegar a un acuerdo, que no podría demorar demasiado.
2 Responses
Es más que penoso que por dos millones de dólares mensuales,se permita degradar la naturaleza y alterar el equilibrio ambiental. Los daños son tremendos,el beneficio más que magro. Los números son todos disfrazados la mano de obra que ocupa es insignificante. Estas explotaciones no son para todos. Se benefician muy pocos.los proyectos de voladero y jacal, ya se agotan. En qué cambio San Juan, o jacal. Quien vio un mango o una obra con plata del oro? Esta minería es falacia.
estimados, tengo 10 mil hectareas en el area que uds. comienzan a buscar el litio y deseo venderlas, si les interesa no duden en contactarme por mail o al 3416178250