“Podríamos haber ido a San Martín de los Andes o Villa La Angostura, pero era hacernos trampa jugando al solitario”, describió un armador político del macrismo local en la previa a la visita del presidente Mauricio Macri a la capital de Vaca Muerta. Sabían que estaban organizando una apuesta arriesgada y los resultados confirmaron las sospechas. La marcha del “Sí, se puede” en Neuquén mostró ayer un débil apoyo al mandatario nacional pese a un ostentoso despliegue de seguridad y movilización que se extendió durante todo el día.
El número de asistentes se calculó en 2.000 personas, una cifra que cualquier marcha “estándar” de los sindicatos estatales (que las hay con bastante regularidad) supera con comodidad. Los organizadores, sin embargo, la calificaron como “una multitud”.
Macri se refirió a la provincia como “el corazón de la Argentina” y aseguró que podrá convertir al país “en potencia mundial en energía” si se sigue trabajando en el mismo camino.
Justamente es ese rumbo el que está en tela de juicio por estos días, con un nuevo cambio de reglas de juego dispuesto por el gobierno nacional para compensar a provincias y operadoras tras el congelamiento del barril de petróleo. Esos detalles no parecen inquietar al núcleo duro del presidente, que se mueve con consignas más generales como “justicia” “república” o “lucha contra el narcotráfico”, aunque terminan por definir buena parte de los triunfos y las desgracias de una economía y una sociedad que se mueven en torno a la industria hidrocarburífera. Un dato: las últimas cifras del Indec revelaron que la indigencia ya creció un punto en la capital y afecta a más de 10.800 personas.
Nadie llevó ayer a la marcha un cartel con consignas vinculadas a Vaca Muerta, una agenda que parece movilizar más al Movimiento Popular Neuquino, el partido que le disputará a Juntos por el Cambio la tercera banca de senador en las elecciones del 27 de octubre (las dos primeras, es casi un hecho, quedarán en manos del Frente de Todos).
Macri criticó ayer a Guillermo Pereyra, el candidato del oficialismo provincial y líder de Petroleros Privados, por pertenecer al “panquequismo nacional”. Fue en una entrevista radial que dio antes de llegar a la capital y en la que cuestionó al senador y sindicalista por “decidir hacer una cosa un día, otra cosa otro día” en relación a su apoyo a la fórmula de Alberto Fernández para la presidencia.
Gutiérrez ausente
Macri se mostró herido por el desplante de su otrora aliado en la adenda al convenio colectivo de trabajo del sector que permitió una aceleración de inversiones en Vaca Muerta, aunque destacó que con el gobernador Omar Gutiérrez “se ha trabajado mucho”. Su “neutralidad” en la contienda electoral nacional (se mantuvo ajeno a la decisión de Pereyra de acompañar su boleta con la de Fernández) lo ubicó ayer lejos de la capital donde sucedió el evento político del día. Dejó una suerte de “zona liberada” para que Macri pudiera hacer su acto sin ningún tipo de presencia del gobierno provincial en la zona pero sí en compañía del municipio de Neuquén que, hasta el 10 de diciembre, será administrado por el radical macrista Horacio Quiroga.
Gutiérrez se fue un día antes de gira al interior y se ocupó de publicar en sus redes sociales recorridas de obras y reuniones con intendentes. Por otros carriles, sin embargo, avisó que insistirá en la demanda contra el gobierno nacional por el congelamiento del precio del barril de petróleo y advirtió que la disposición publicada esta semana por el ministerio de Hacienda para compensar a las empresas siempre y cuando las provincias desistan de medidas judiciales es “inviable” y “demuestra que el DNU 655/19 debe ser derogado inmediatamente para recuperar estabilidad y reglas claras».
Macri dijo ayer que “si hay credibilidad en la Argentina, como la ha habido estos tres años, Vaca Muerta va a ser una realidad”, aunque los pasos erráticos de su administración en esta materia parecieran ir en sentido contrario.
En las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto, la fórmula que encabeza junto a Miguel Pichetto consiguió en la provincia 108.561 votos frente a los 176.509 de su principal contrincante, Alberto Fernández. Neuquén mantiene su tradición kirchnerista y quedó ayer demostrado con una participación tibia en la marcha del “Sí, se puede” que Macri trajo a la capital y su contraparte en la movilización opositora que el sindicato ATE organizó para repudiar su visita. “En Neuquén siempre damos la nota”, se mofó el secretario general del gremio al advertirla como la única ciudad donde, hasta ahora, hubo manifestaciones en contra del primer mandatario.
En Neuquén se marcha por todo, todo el tiempo. Ayer, mientras Macri arengaba a sus simpatizantes desde el monumento a San Martín, en Cutral Co, la ciudad petrolera ubicada a 120 kilómetros, se levantaba un intento de “pueblada” contra el crimen de un niño de 8 años que resultó baleado en la cabeza mientras jugaba en la vereda de su vivienda.
5 Responses
Comparar una marcha del pueblo con una marcha sindical es poco feliz, comparar la cantidad de participantes de una marcha sindical en la cual los que participan no van a trabajar con una marcha del pueblo en horario y día laboral, es poco feliz.
La actitud de ATE fue
profundamente antidemocrática e intimidatoria. Solo los que están acostumbrados a vivir en feudos pueden celebrarla!
Coincido con Norberto, los energúmenos de ATE, fieles a su estrategia violenta, atemorizaron a potenciales asistentes a la marcha del «Sí se puede»
Segun el computo real de las Fuerzas de Seguridad de la provincia del Neuquen,hubo casi 5.000 personas en el «Si,Se Puede»,para una provincia de pocos habitantes la convocatoria fue un exito!!
Segun el computo realizado por las Fuerzas de Seguridad de la Provincia del Neuquen,hubo mas de 5.000 personas en la convocatoria del «SI,SE PUEDE»,para una provincia con pocos habitantes,la convocatoria fue un exito total,por la espontaneidad de la gente de concurrir al mitin politico.Nadie les pago nada,ni le pusieron micros,ni hubo choripan y gaseosa gratis!!