Luego del fracaso de la primera licitación, el gobierno aprobó a fines de marzo un nuevo pliego de bases y condiciones para avanzar con la privatización de la central térmica Ensenada Barragán y en una circular aclaratoria publicada la semana pasada flexibilizó las condiciones de pago para tratar de sumar interesados. El 20 de mayo vence el plazo para la recepción de solicitudes. YPF aparece como el principal candidato a quedarse con la planta, por la que podría pagar unos US$ 600 millones. Para la Secretaría de Energía, la privatización es un proyecto estratégico, porque con el dinero que obtenga de esa operación prevé financiar parte de la construcción de nuevo gasoducto troncal desde Vaca Muerta; la iniciativa energética que lidera la agenda del Ejecutivo.
El 31 de octubre de 2017 el presidente Mauricio Macri instruyó al entonces Ministerio de Energía a avanzar con la venta de las centrales Ensenada Barragán y Brigadier López, tarea que quedó a cargo de Integración Energética Argentina (IEASA). El 19 de junio de 2018 se aprobaron los pliegos. YPF y Central Puerto presentaron ofertas, pero a fines de marzo la licitación fue declarada desierta.
Central Puerto había ofertado 583,5 millones de dólares (279,5 millones y hacerse cargo de una deuda de 304 millones de dólares que Ensenada Barragán tiene con el Fondo de Garantía de Sustentabilidad – FGS). YPF, por su parte, había ofrecido 229 millones de dólares y el pago de la deuda con la Anses. Sin embargo, ninguna de las ofertas prosperó.
La compañía que preside Guillermo Reca quedó fuera de carrera porque también había hecho una oferta por Brigadier López, pero había aclarado expresamente que no tenía garantizado el financiamiento para las dos operaciones. Por lo tanto, cuando se le adjudicó la planta santafesina la oferta que había hecho por Ensenada Barragán quedó sin efecto.
Esa situación le había dejado el camino libre a la petrolera YPF, pero la firma comandada por Miguel Ángel Gutiérrez propuso un canje de deuda por la central. Es decir, que el Estado salde parte de la deuda por el Plan Gas que tiene con la compañía otorgándole la central térmica. La propuesta vulneraba los criterios establecidos en el pliego ya que el mismo no contemplaba el canje de deuda como modalidad de pago ya que si eso hubiese sido posible tal vez los oferentes hubiesen sido más. De hecho, las generadoras eléctricas también tienen acreencias con el Estado por los papeles del Foninvemem, pero el pliego permitía cancelar solo una parte del precio total y ni siquiera del pago en efectivo, sino solo parte de la deuda que la central mantiene con el FGS. Por esa razón, IEASA también descalificó a YPF.
Segunda vuelta
Luego del traspié, el gobierno presentó un nuevo pliego de bases y condiciones y en la circular 5 publicada la semana pasada flexibilizó las condiciones de pago al extender el plazo para la cancelación de la deuda que la central tiene con la Anses. Allí dice que se otorgará un período de gracia de 24 meses, durante el cual sólo serán pagaderos los intereses, a una tasa Libor + 6,5%. A su vez, las cuotas de amortización de capital se determinan para un período de repago de 60 meses, de forma de arrojar servicios de deuda constantes.
La suba del riesgo país en un contexto de creciente incertidumbre electoral igual permite anticipar que será difícil conseguir candidatos. En este escenario, la petrolera YPF, controlada por el Estado Nacional, aparece como el principal candidato a quedarse con el activo a través de YPF Luz, su subsidiaria que participa del negocio de generación de energía. El gobierno ya anticipó que el dinero que recaude por esta venta será destinado a la construcción del gasoducto de Vaca Muerta. Por lo tanto, en los hechos, si YPF Luz termina adquiriendo la central Ensenada Barragán, estará financiando indirectamente la instalación de la nueva tubería troncal desde la cuenca Neuquina, que la terminará beneficiando porque ampliará la capacidad de transporte de gas desde Neuquén, donde YPF es el mayor productor de gas. “YPF es la única firma que aparece en condiciones de comprar algo en este contexto”, reconoció a EconoJournal una fuente oficial.