Gustavo Lopetegui fue nombrado hoy formalmente como secretario de Energía a través del decreto 28/2019. Si bien apenas Javier Iguacel presentó su renuncia a fin de año, desde el gobierno informaron que el ex vicejefe de Gabinete y hombre de confianza de Mauricio Macri quedaría al frente de la cartera, se esperaba su designación oficial para que el flamante funcionario pueda ponerle la firma a una serie de cuestiones clave. Entre las prioridades sobresalen cambios en el programa de estímulo a la inyección de gas no convencional previsto en la resolución 46/2017, modificaciones en la modalidad de las subastas de gas y la reforma del mercado de generación eléctrica.
Resolución 46/17. El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, hace al menos seis meses que impulsa un recorte de esos subsidios y puertas adentros acusaba a Iguacel de no poner la energía suficiente para avanzar con el tema o directamente entorpecer la posibilidad de cambios en la resolución 46/17 para adecuar la erogación a las restricciones fiscales vigentes. El subsidio equivale a la diferencia entre un precio estímulo fijado por la autoridad regulatoria y el precio efectivo promedio de venta de gas en el mercado local. El año pasado ese precio estímulo fue de 7,50 dólares por millón de BTU, unos tres dólares por encima del precio de mercado, y la resolución 46/17 prevé que se reduzca a 7 dólares este año; a 6,50 en 2020 y a 6 dólares en 2021. Eso supondría un desembolso este año de unos 1200 millones de dólares por parte del Estado Nacional, pero el objetivo es reducir esa erogación a unos 700 millones. Antes de avanzar, el gobierno está explorando todas las opciones administrativas y legales para blindar al Estado frente a un eventual litigio judicial con empresas productoras que tienen proyectos presentados en ese programa y que probablemente sean readecuados o dejados sin efecto. Incluso fuentes privadas le recomendaron contratar a uno o dos estudios jurídicos prestigiosos para que hagan un dictamen donde se detalle cuán riesgoso puede ser modificar la resolución.
Subastas de gas. Hasta ahora las licitaciones para la compra de gas se venían haciendo bajo la modalidad interrumpible. Por lo tanto, si algún productor o comercializador se comprometía a proveer gas a un determinado precio, pero luego no lo conseguía no se le aplicaba ninguna penalidad. En el sector subrayan que este esquema distorsionó el mercado al forzar una baja de precios por parte de jugadores que no corrían mayores riesgos si luego no podían garantizar el fluido al valor que habían ofrecido. Ahora, en cambio, se licitará gas bajo la modalidad ininterrumpible. Por lo tanto, si cuando llega el momento el productor o comercializador no puede garantizarle el gas a la distribuidora al valor comprometido deberá afrontar una penalidad. El gobierno trabaja sobre este nuevo esquema. La primera licitación será la semana del 11 de febrero y en los próximos días se publicará el pliego de licitación para que los privados puedan hacer sus aportes de modo no vinculante.
Reforma del mercado de generación eléctrica. Este tema también está entre las prioridades de Lopetegui. Iguacel estaba trabajando en una modificación del esquema previsto en la resolución 19 E/2017 de la entonces secretaría de Energía Eléctrica que estableció los mecanismos de remuneración por potencia y energía generada por las generadoras. El ex funcionario buscaba avanzar con un esquema que priorice la eficiencia al otorgar una mayor remuneración a las centrales más eficientes. Eso implicaba una disminución de los cargos que se pagan por potencia disponible y un incremento de los cargos que se pagan por energía generada. Varias empresas han venido advirtiendo que ese esquema podría desembocar en una disminución de la potencia disponible para el próximo invierno generando una complicación en la sustentabilidad del sistema. Lopetegui debe definir ahora la letra fina de esa regulación.