YPF quiere tener este año una decena de proyectos de explotación de Vaca Muerta en marcha. Eso implica, en la práctica, sumar siete emprendimientos a los tres que ya están lanzados: dos en etapa de desarrollo, Loma Campana y El Orejano; y uno en instancia de piloto, La Amarga Chica. A esa tarea, la petrolera bajo control del Estado asignó en 2017 un inversión de más de US$ 450 millones. Así lo aseguró el viernes pasado Ricardo Darré, CEO de la compañía, en conferencia con inversores tras la presentación de resultados del cuarto trimestre de 2016.
“Con la performance de las operaciones en funcionamiento, nos sentimos muy cómodos al ampliar nuestra actividad en Vaca Muerta mediante una serie de nuevos proyectos piloto en 2017”, aseguró el ejecutivo, que desde que asumió en abril mantuvo un cuidado sobajo perfil. “La ubicación de la mayoría de estas nuevas iniciativas se concentra en dos regiones distintas de la cuenca Neuquina. Por un lado, tenemos bloques contiguos a otros que ya están en desarrollo. A su vez, nos estamos moviendo más lejos en la ventana de gas seco», agregó.
YPF cuenta hasta ahora con dos operaciones en desarrollo sobre Vaca Muerta, emplazadas en Loma Campana, donde produce fundamentalmente shale oil asociado con Chevron, y El Orejano, donde está extrayendo shale gas en asociación con Dow. Al mismo tiempo, el año pasado lanzó un proyecto piloto en La Amarga Chica junto con la petrolera malaya Petronas. En esos campos que opera, y también en otras áreas donde participa como socio, la mayor petrolera del mercado invertirá este año US$ 2269 millones, según indicó en enero Miguel Gutiérrez, presidente de la compañía.
El viernes, Darré precisó que en los siete proyectos que la petrolera espera poner en actividad este año invertirá un cifra adicional de US$ 450 millones. “Lo que tendremos año es un aumento significativo del Capex de exploración. Con los proyectos piloto que vamos a lanzar este año para ampliar nuestro conocimiento de Vaca Muerta y los límites para YPF en esa formación, sumado a su vez a la exploración ordinaria que teníamos previsto, vamos a invertir en el orden de $ 450 Millones este año”, indicó.
En concreto, YPF empezará en 2017 a perforar los campos Bandurria Sur, Bajada de Añelo, Aguada de la Arena y La Ribera I, ubicados en territorio aledaños a la intersección triangular generada entre Loma Campana, La Amarga Chica y El Orejano. También comenzará a perforar Salinas de Huitrin y Cerro Arena, sobre la ventana de gas seco de Vaca Muerta. Y al mismo tiempo, realizará un piloto de shale gas en Rincón del Mangrullo, un campo donde desarrolló una significativa producción de tight gas (más de 5 MMm3/día del fluido), y retomará la perforación de Bajo del Toro, un área que supo estar en manos de EOG Resources, una petrolera norteamericana que en 2011 perforó uno de los primeros pozos de shale oil en Vaca Muerta.
Si bien Darré no especificó qué cantidad total de pozos prevé el lanzamiento de los nuevos proyectos, se estima que en cada área se colocarán, en promedio, cinco pozos para empezar a delinear el perfil productivo de cada bloque. Por lo que, la cifra total de pozos a perforar rondará los 35 pozos.