La petrolera colombiana GeoPark firmó un acuerdo con Pluspetrol para adquirir el 100% de la participación operada en los bloques Loma Jarillosa Este y Puesto Silva Oeste, en la ventana del black oil de Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén. La operación que se espera cerrar antes de finalizar el año, con la publicación del correspondiente decreto provincial que ratifique el acuerdo, permitirá finalmente su ingreso a la formación no convencional, luego de un intento frustrado con Phoenix Global Resources.
GeoPark pagará US$115 millones al cierre de la operación, con un depósito de garantía de US$22,7 millones en la fecha en que Pluspetrol y GeoPark suscribieron el acuerdo, con lo cual el precio acordado representa una valoración de aproximadamente US$9.550 por acre.
El bloque Loma Jarillosa Este tiene un contrato de transferencia de la concesión de Pluspetrol de 6.054 acres, con una licencia de explotación vigente hasta 2057, mientras que el detalle de Silva Oeste es de 6.301 acres, pero con el otorgamiento de una nueva licencia de explotación de 35 años, que incluye autorización de transporte.

En esta oportunidad, GeoPark también llegó a un entendimiento con el gobierno neuquino que se reflejó en la firma de dos “Actas Acuerdo”, que establecen los términos y condiciones bajo los cuales se transferirán las concesiones. Estas actas incluyen la emisión de una nueva licencia de explotación no convencional para el bloque Puesto Silva Oeste, que requiere que GeoPark transfiera un 5% de participación a Gas y Petróleo del Neuquén (GyP), con lo cual resulta en una participación operada del 95% en este bloque.
La llegada a Vaca Muerta
“El acuerdo de hoy marca un hito histórico para GeoPark, transformando a la compañía al incorporar producción inmediata, mayores reservas y un valor significativo a largo plazo. También demuestra nuestro compromiso de impulsar un crecimiento sostenible de largo plazo, combinando desarrollos orgánicos con adquisiciones estratégicas”, expresó Felipe Bayon, CEO de GeoPark, al sarse a conocer este jueves la operación.
“Los bloques Loma Jarillosa Este y Puesto Silva Oeste nos otorgan una posición de entrada privilegiada en una de las formaciones no convencionales más prolíficas del mundo”, aseguró el directivo de la petrolera independiente que tiene otras operaciones en la región en locaciones de Colombia, Brasil y Ecuador, aunque en cada caso con distintos presente productivos.
El plan de desarrollo de los dos bloques requiere una inversión bruta de US$500 a 600 millones hasta 2028, con lo cual el ratio máximo de deuda neta a EBITDA estimado por la compañía sería de 2,0–2,5x en 2026, para luego reducirse rápidamente a menos de 1,0x al alcanzarse el EBITDA ajustado del plateau. Como parte de ese plan se proyecta un potencial para perforar de hasta 55 pozos adicionales en 15 pads liberando más de 60 mmboe de volúmenes recuperables brutos.
La petrolera comunicó que “la adquisición de los dos bloques materializa la intención estratégica de GeoPark de establecer una posición en Vaca Muerta, una formación probada de petróleo y gas no convencional en crecimiento y de clase mundial”. Como operador acreditado en no convencionales, la petrolera aseguró que está en posición de contribuir activamente al ecosistema operativo de la cuenca, al tiempo que busca nuevas oportunidades e iniciativas de eficiencia.

La adquisición de Loma Jarillosa Este y Puesto Silva Oeste le aportará a la compañía una escala y proyección de largo plazo, con más de 12.300 acres brutos en la ventana de petróleo negro de Vaca Muerta.
La producción actual de 1.700 a 2.000 barriles de petróleo diarios equivalentes (Boepd) que se componen en 95% petróleo y 5% gas en los bloques adquiridos eleva la producción proforma consolidada de GeoPark a aproximadamente 30.000 boepd en 2025, con un índice de vida de reservas de 7 años para reservas 1P, es decir las reservas probadas, y más de 10 años para reservas 2P, probadas más probables.
Proyección de crecimiento
La compañía también planteó una trayectoria de crecimiento que le permitirá alcanzar una producción en el plateau de aproximadamente 20.000 boepd hacia finales de 2028. Los bloques adquiridos cuentan con reservas 2P estimadas de 25,8 mmboe y recursos contingentes 2C -es decir los estimados bajo alguna contingencia de carácter técnico, económico o ambiental- en 44.2 mmboe, lo que representa un potencial adicional significativo.
La operación también tiene una perspectiva de creación de valor para Geopark, que se verá reflejado en un incremento proforma de EBITDA ajustado de US$ 12 a 14 millones en el año completo 2025. En el plateau de producción esperado, se estima que los activos aporten entre US$300 y 350 millones de EBITDA ajustado bruto, a un precio de Brent de US$70/bbl promedio.
La producción actual se procesa con una batería capaz de procesar hasta 6.000 bopd en el bloque Loma Jarillosa Este. GeoPark planea desarrollar ambos bloques como un hub, con la construcción de una nueva facilidad central de procesamiento en el bloque Puesto Silva Oeste con una capacidad estimada de aproximadamente 20.000 bopd y un oleoducto que conectará ambos bloques. La construcción de esta infraestructura está prevista para iniciar en 2026 y entrar en operación a tiempo para respaldar la producción anticipada en el plateau.