La petrolera YPF sigue adelante con su proceso de desinversión de los bloques convencionales en casi una decena de provincias y abrió una nueva ronda del Proyecto Andes que contempla la cesión de otros 16 bloques. La compañía acaba de concretar la reversión de 10 áreas en la provincia de Santa Cruz y avanza en un acuerdo de similares características en Tierra del Fuego.
La compañía dio por cerrada la primera etapa del Proyecto Andes con la cesión de 28 activos convencionales ubicados en las provincias de Chubut, Mendoza, Neuquén y Río Negro. A la par anunció que «a partir esta exitosa experiencia», YPF abre una nueva ronda del Proyecto Andes liderado por el Banco Santander que contempla la cesión de 16 bloques tanto operados como no operados.
En esta nueva instancia las áreas incluidas se encuentran agrupadas en el clúster NOA, en Salta; en los clústeres Chachahuen, y Malargüe, ambos en Mendoza; Agua Salada, en Río Negro; Manantiales Behr, en Chubut, y el clúster Mendoza, con campos no operados en las provincias de Mendoza y La Pampa.

Acuerdos cerrados
En paralelo, YPF viene de concretar la reversión de 11 áreas. En particular, acaba de firmar semanas atrás el acuerdo con la provincia de Santa Cruz por el cual transfirió 10 concesiones del norte de la provincia a la estatal Fomicruz. Se trata de los yacimientos Cerro Piedra-Cerro Guadal Norte; Barranca Yankowsky; Los Monos; El Guadal-Lomas del Cuy; Cañadón Vasco; Cañadón Yatel; Pico Truncado-El Cordón; Los Perales-Las Mesetas; y Cañadón León-Meseta Espinosa; y Cañadón de la Escondida Las Heras.
Tras concertarse la formalización de la cesión de áreas junto a las concesiones de transporte asociadas, que vincula la planta de Las Heras con la brida de ingreso a la terminal de Termap en Caleta Olivia, la provincia avanza en una etapa acelerada de licitación a nuevos oferentes, de manera de poder relanzar esos campos maduros que vienen de años de declino.
La petrolera también acordó con la provincia de Chubut la reversión del área Restinga, lo que días atrás fue aprobado por la legislatura provincial. Ese entendimiento incluyó el compromiso de remediación de pasivos ambientales y abandono de pozos por parte de YPF y el pago de US$ 25 millones a la provincia en concepto de contraprestación por eventuales reclamos.
Finalmente, YPF está en etapa de negociación con el gobierno de Tierra del Fuego con la idea de concretar la reversión de áreas en esa provincia lo que contempla también la reversión de las concesiones pero en favor de la compañía estatal de energía Terra Ignis, por ser considerados activos clave para el desarrollo energético de la provincia, según declaró oportunamente el gobernador Gustavo Melella.
Este plan de manejo del porfolio de activos convencionales constituye uno de los pilares del Plan 4×4 que lleva adelante la actual gestión del CEO y presidente de la compañía, Horacio Marin. A través de una reasignación de capital, YPF busca enfocar su operación en el desarrollo de Vaca Muerta, mejorar su rentabilidad y aportar a generar exportaciones por US$30.000 millones para 2030.