Este miércoles la distribuidora Edesur energizó con éxito el primer transformador de 80 megavolt-ampere (MVA) de la subestación Caballito, que el último sábado 10 de febrero se prendió fuego y quedó totalmente destruida. El nuevo transformador está a cielo abierto porque el edificio quedó sin techo. Luego de la instalación del primer transformador -de los dos que necesita- este jueves Edesur pudo “transferir el servicio de los generadores a la red de una buena cantidad de los 100.000 usuarios totales que fueron afectados por el incendio”, según indicaron fuentes de la distribuidora a EconoJournal.
En las últimas horas, Edesur comenzó a apagar y retirar algunos de los gigantescos grupos electrógenos que tuvo que instalar en las inmediaciones de la subestación para abastecer a los usuarios. En total, había conectado 48 megawatts (MW) a partir de 35 grupos electrógenos de gran potencia y siete equipos Four Packs, que son los containers que se instalan cuando hay cortes de electricidad prolongados.
Según cálculos de la compañía, el alquiler de los equipos y el consumo de gasoil demandaron hasta ahora más de 10 millones de dólares. Luego de la instalación del transformador nuevo, Edesur dejará los equipos Four Packs, que harán de back up hasta que ingrese en operación el segundo.
Equipos
La distribuidora estima que a fines de mayo estará operativo el segundo transformador de 80 MVA, una unidad de potencia utilizada en grandes instalaciones de generación de energía eléctrica. En total, la subestación recuperará los 160 MVA originales distribuidos en el incendio a partir de dos transformadores AT/MT de 80 MVA cada uno, con cuatro barras y 8 salidas MT por sección. También instalará los nuevos tableros de operación.
El edificio de la subestación Caballito tiene 25 metros de frente por 40 de fondo y quedó destruido por completo. Edesur terminará la reconstrucción de la parte eléctrica a fines de mayo, pero la obra civil estará lista en octubre o principios de noviembre. “Normalmente construir una subestación de estas dimensiones demora casi dos años”, señalaron fuentes del sector eléctrico a EconoJournal.
La subestación Caballito está ubicada en José María Moreno 333 de la ciudad de Buenos Aires y se renovó y repotenció en 2015, según informaron desde Edesur. Transforma la energía de alta a media tensión y se distribuye en baja a los hogares y comercios. Las llamas destruyeron la planta baja y el primer piso por completo.
Luego del apagón que se provocó, Edesur pudo abastecer una parte desde otras subestaciones, pero quedaron más de 60.000 usuarios sin servicio. Según informó la distribuidora, que pertenece al grupo italiano Enel, el incendio se provocó cuando una cuadrilla realizaba trabajos programados y hubo una filtración de aceite en una máquina de tratamiento que se utiliza para realizar el mantenimiento en los transformadores.