El CEO de Wintershall Dea, Mario Mehren, destacó la decisión final de inversión para el proyecto de desarrollo gasífero Fénix, a 60 kilómetros de la costa de Tierra del Fuego. “Con una puesta en marcha prevista para 2025 y una producción máxima esperada de unos 65.000 barriles equivalentes de petróleo (bpe) al día, Fénix impulsará considerablemente el suministro de gas de Argentina y reducirá aún más la dependencia del país de las importaciones de GNL”, señaló durante la presentación de los resultados trimestrales de la compañía. Mehren también ponderó la flamante adquisición de una participación en un bloque offshore en México y ratificó que no realizará nuevas inversiones en Rusia.
El desarrollo del yacimiento Fénix comprenderá la perforación de tres pozos horizontales, desde una nueva plataforma automatizada ubicada en el mar, donde la profundidad de agua es de 70 metros. El gas producido será transportado a través de un nuevo gasoducto de 35 km hasta la plataforma Véga Pleyade y procesado en tierra en las instalaciones de Río Cullen y Cañadón Alfa.
Además, Wintershall Dea anunció el lunes un acuerdo con Hokchi Energy, la subsidiaria mexicana de Pan American Energy, con el propósito de adquirir un 37% de participaciones no operativas en el Bloque Hokchi, con opción de aumentar dicha participación hasta en un 40% en una fase posterior.
A través de esta adquisición, Wintershall Dea se convertirá en el segundo socio mayoritario del Bloque Hokchi, después del operador actual, Hokchi Energy. Con una producción actual de 26.000 barriles equivalentes de petróleo por día en Hokchi, la petrolera alemana espera incrementar la producción a 37.000 bep diarios en 2023.
Contratos de largo plazo
Mehren aseguró además que los contratos de largo plazo son necesarios para movilizar las inversiones en gas y petróleo que garanticen el suministro presente y futuro. “La combinación de la oferta y la demanda a través de un contrato de largo plazo es muy importante”, sostuvo el ejecutivo.
El suministro de energía en Europa será ajustado durante el invierno. Mehren ponderó las medidas que la Unión Europea y países como Alemania están tomando para reforzar el suministro, pero remarcó la necesidad de incrementar la producción doméstica.
“Cuando hablamos de seguridad de suministro, también tenemos que hablar de producción nacional en Europa y Alemania. La producción nacional debe ser un pilar muy importante de nuestra estrategia de diversificación. Wintershall Dea está produciendo en Alemania 2,5 millones de metros cúbicos de gas por día. Podríamos producir aún más gas y también petróleo si encontramos el apoyo de los políticos”, consideró el CEO de la petrolera alemana.
En ese sentido, la firma de contratos de largo plazo es un vehículo necesario para movilizar las inversiones necesarias en gas y petróleo. “La combinación de la oferta y la demanda a través de un contrato de largo plazo es muy importante. Si queremos seguridad de suministro en Europa debemos garantizar seguridad de demanda. Eso es lo que ha estado faltando en los últimos años”, respondió Mehren a una consulta de EconoJournal durante la conferencia.
“Regresar a contratos de suministro de largo plazo definitivamente permitirá nuevas inversiones, lo cual es urgente”, afirmó.
Resultado trimestral
La petrolera mantuvo una performance fuerte en el tercer trimestre, con una producción diaria de hidrocarburos de 614.000 barriles diarios equivalentes de petróleo, un 4% más que hace un año.
En lo financiero informó un EBITDAX de € 2600 millones, un incremento interanual de 162%. Los ingresos netos ajustados ascendieron a € 851 millones, un aumento interanual de 264%. El flujo libre de caja fue de 1600 millones, un 289% más que hace un año.
“No hay vuelta a los negocios habituales” en Rusia
La compañía alemana es una de las tantas petroleras del mundo que debieron tomar decisiones estratégicas con respecto a sus operaciones en Rusia, luego de la invasión y guerra desatada en Ucrania.
Mehren ratificó que la compañía no realizará inversiones nuevas en Rusia o con Rusia.
“La guerra continúa y escala. Para Wintershall Dea esta claro que no habrá vuelta a los negocios habituales en Rusia luego de esta guerra agresiva contra Ucrania”, evaluó.
“Rusia se ha vuelto impredecible en todos los aspectos. Desafortunadamente, esto también es cierto para los suministros de energía”, añadió.
Wintershall Dea decidió en marzo contabilizar a pérdida la financiación aportada para la construcción del gasoducto Nord Stream 2, que ascendía a 1000 millones de euros. Consultado sobre las explosiones que dañaron el gasoducto, el CEO afirmó que “Wintershall Dea no tiene ninguna información sobre la raíz del sabotaje o la extensión de los daños más allá de la información que es pública”.
Sobre las operaciones actuales en Rusia, Mehren destacó que la compañía debe definir como avanzar estratégicamente. “Estamos analizando si es posible o no separar legalmente el negocio internacional del negocio ruso”, explicó.
En el tercer trimestre, Rusia representó casi el 50% de la producción mundial de Wintershall Dea, pero solo el 25% del EBITDAX y del flujo de caja libre de la compañía.