La reunión fue este jueves y el presidente de Barrick estuvo acompañado por miembros del directorio global y ejecutivos locales de la compañía.
El ministro de Energía y Minería de la Nación, Juan José Aranguren, y el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, acompañados por el secretario de Minería de la Nación, Daniel Meilán, y el ministro de Minería de San Juan, Alberto Hensel, se reunieron hoy con el presidente de la empresa Barrick Gold, Kelvin Dushnisky, acompañado de miembros del directorio global y ejecutivos locales de la compañía.
El Estado Nacional, como titular del diseño de la política minera federal y la provincia de San Juan, dueña de los recursos minerales y otorgante de la concesión, convocaron al titular de la empresa a partir de la sucesión de incidentes operacionales verificados en el emprendimiento Veladero.
Durante la reunión –mantenida el mismo día del anuncio de una asociación estratégica entre la empresa y la compañía Shandong Gold por la que le participa a esta última del 50% de sus activos en el país – el ministro y el gobernador expresaron en forma unánime su posición respecto de que la continuidad de las actividades de Barrick Gold en el país se encuentra sujeta a la presentación y aprobación de un nuevo plan integral de trabajo, con estricta sujeción a la normativa minera y ambiental vigente y a los más altos estándares internaciones aplicables.
El mencionado plan integral deberá contemplar, entre otros aspectos, la completa reingeniería de los procesos y estándares operativos y ambientales del emprendimiento Veladero, un programa de desarrollo social y comunitario, el rediseño de un proceso de diálogo permanente, transparente y abierto con las autoridades y comunidades locales, un plan de inversiones y desarrollo de los restantes activos existentes en la provincia, y la sujeción de todo ello a un mecanismo de auditoría integral en manos de reconocidos organismos y expertos nacionales e internacionales.
Mientras el mencionado plan no sea debidamente validado, las actividades de lixiviación en la mina Veladero se encontrarán suspendidas, sin que ello implique afectar en ninguna forma al personal que trabaja en ella, ni la percepción de sus correspondientes salarios.
La empresa, más allá de señalar que los incidentes acaecidos no revisten, a su entender, entidad ni gravedad ambiental, aceptó las condiciones impuestas por las autoridades nacionales y provinciales, y comprometió sus máximos esfuerzos a la elaboración del plan integral referido.
La posición del gobierno argentino, representado por los estados nacional y provincial, tiene como objetivo lograr el desarrollo de una actividad minera responsable, que cuide el medio ambiente y promueva el bienestar de sus habitantes.